Crece en Europa el malestar contra las restricciones
En varios países hubo protestas pacíficas contra los confinamientos y las medidas de control.
BERLÍN.– Varios países europeos fueron este fin de semana escenario de manifestaciones contra las restricciones impuestas a causa de la pandemia, unas medidas que podrían alargarse meses, según dijeron las autoridades alemanas, mientras el virus seguía propagándose por el planeta.
Europa, con casi 335.000 fallecidos y más de 14,4 millones de casos, es la región donde el virus está avanzando más vertiginosamente. Para frenarlo, las autoridades no cesan de imponer nuevas restricciones y preparan a las poblaciones para una situación que podría ser larga.
En Alemania, donde está vigente un confinamiento parcial desde hace dos semanas, el ministro de Economía, Peter Altmaier, advirtió ayer que las restricciones podrían durar al menos cuatro o cinco meses más.
Desde que se cerraron bares, restaurantes, gimnasios y otros centros de ocio a principios de noviembre, el número de nuevas infecciones diarias ha ido bajando, pero sigue siendo alto, con un récord de más de 23.000 nuevos casos registrados el viernes último.
“Tendremos que vivir con precauciones considerables y restricciones durante al menos los próximos cuatro o cinco meses”, declaró Altmaier.
Pero después de meses de restricciones, solo interrumpidas durante el verano, el hartazgo de la gente va en aumento y algunos salen a la calle para protestar.
En Alemania, donde hay manifestaciones contra las restricciones desde hace semanas, centenares de personas volvieron a desfilar el sábado en Fráncfort y otras ciudades. La policía tuvo que utilizar tanques de agua para dispersar a algunos manifestantes.
En Portugal, donde ya imperaba un toque de queda nocturno y a partir de este fin de semana también se instauró un toque de queda de fin de semana para el 70% de la población, medio millar de personas desafiaron las prohibiciones para llevar a cabo una “marcha por la libertad” en Lisboa.
También hubo disturbios en España, particularmente en Madrid, donde algunos manifestantes incendiaron tachos de basura. Centenares de católicos protestaron por su parte durante el fin de semana en varias localidades de Francia contra la prohibición de las misas durante el confinamiento, que durará como mínimo hasta principios de diciembre.
Aunque las iglesias siguen abiertas durante este segundo confinamiento en Francia, que empezó el 30 de octubre, las misas están prohibidas. En la ciudad de Burdeos, en el sudoeste del país, unos 300 fieles se concentraron ayer delante de la catedral para exigir que les dejen celebrar esa ceremonia.
En Chipre, una manifestación en el poblado costero de Limassol terminó en vandalismo cuando algunos de los que protestaban desafiando las restricciones destrozaron vitrinas y lanzaron bombas molotov contra la policía. Un tribunal ordenó mantener detenidas a nueve personas por tres días.
La violencia estalló la tarde del sábado luego de que las autoridades ordenaron un confinamiento colectivo de 19 días con toque de queda para toda la población como medida para contrarrestar la pandemia.
El virus por el mundo
El virus, mientras tanto, sigue avanzando a pasos agigantados en otras zonas del mundo.
Estados Unidos es de lejos el país más enlutado por la pandemia, con 245.614 decesos y más de 10,9 millones de contagios. Las cifras, que siguen superando los 1000 decesos diarios, no sugieren que la situación esté mejorando. Hace apenas unos días, el país superó el trágico umbral de 200.000 contagios en un día.
La región de América Latina y el Caribe suma ya más de 423.000 fallecidos y unos 12 millones de contagios. México superó el sábado el millón de casos confirmados y el número de decesos roza los 100.000.
Con 128,8 millones de habitantes, México es el cuarto lugar más golpeado, detrás de Estados Unidos, Brasil e India. “La epidemia está muy activa, visto por los repuntes, tanto oficiales como los que registran los clínicos en atención de los pacientes. Probablemente todavía nos falte ver lo peor”, dijo Alejandro Macías, excomisionado nacional contra la pandemia de influenza A H1N1 en 2009.
Para intentar contener la expansión del virus, la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció el cierre de bares y cantinas durante 15 días y adelantó la hora de cierre de restaurantes, cines y gimnasios.
La pandemia provocó al menos 1.313.471 muertos mundiales desde que el virus brotó en China, en diciembre de 2019, y más de 54 millones de personas contrajeron la enfermedad, según un balance establecido partir de fuentes oficiales.
En las últimas 24 horas se registraron 9246 nuevas muertes y casi 608.000 contagios.