Filas para entrar al casino, la nueva postal de Mendoza
Con barbijo, distancia social y sin juegos de cartas, reabrieron después de más de ocho meses
MENDOZA.– No son los bancos ni los supermercados. Ahora las filas están en los casinos, públicos y privados. Así es la postal que se observa por estos días en la tierra del sol y del buen vino: decenas de personas esperando para entrar a jugar por dinero.
Desde que el sábado pasado se habilitaron las 11 salas que existen en la provincia, cada vez más mendocinos deciden ir a probar suerte. A pesar de que se despertó nuevamente el interés por regresar a estos sitios de entretenimiento, tras la cuarentena obligatoria por el nuevo coronavirus Covid-19, la realidad es que no todos pueden entrar como antes, por eso llama la atención lo que pasa en las puertas.
Los protocolos sanitarios para este sector, en medio de la pandemia, son estrictos: el lugar no puede superar en ocupación el 30% de las máquinas autorizadas a operar y se permite un ingreso promedio de 96 personas, bajo controles de higiene y distanciamiento.
De esta manera, a medida que se va descomprimiendo la capacidad dentro del local, se abre la puerta a quien aguarda en el exterior. El horario permitido es desde las 10 hasta las 0.30 y el ingreso no se rige por la terminación del documento de identidad.
Eso sí, está prohibido el ingreso en las salas a personas mayores de 65 años. Además, se mantiene la restricción a los mendocinos que figuran en el Registro de Autoexcluidos, dispuesto por un programa provincial contra la ludopatía.
“No podía esperar más para jugar. Sentía muchas ganas de volver, con todos los cuidados”, contó a Marcela, una vecina de la nacion
Guaymallén, que se acercó a la sala de juegos ubicada sobre la calle Primitivo de la Reta, de la ciudad.
“Hay que hacer fila para entrar, pero vale la pena. Tal vez nos volvamos a casa con algo, pero al menos nos despejamos la cabeza, aunque hay que ser muy responsables”, agregó Ana María, oriunda de la capital provincial, quien se acercó al casino junto con una amiga.
La mayoría de los casinos ubicados en el Gran Mendoza tienen permitido que ingresen 120 personas, mientras que el más chico, que se encuentra en el sur provincial, solamente puede albergar hasta 38 jugadores, de acuerdo con una disposición específica del Instituto Provincial de Juegos y Casinos.
Economía y salud
Fue el gobernador Rodolfo Suárez quien decidió habilitar esta actividad, para seguir con su plan de equilibrio entre economía y salud, teniendo en cuenta la meseta de contagios del nuevo coronavirus Covid-19 en la que se encuentra la provincia.
Además, la administración provincial considera que esta actividad también es clave para las arcas locales. “El Estado tiene que recuperar la posibilidad de recaudar”, indicó Suarez sobre la vuelta de los casinos.
De esta forma, al menos por ahora, solo funcionan las tragamonedas, por lo que los entretenimientos “vivos y tradicionales”, como la ruleta, el black jack o el póquer, deberán esperar, ya que pueden convertirse en un foco de contagio de coronavirus.
Hasta ahora, la provincia registra 52.175 casos positivos confirmados de Covid-19. Asimismo, hay 33.076 personas recuperadas. Sin embargo, 1041 mendocinos murieron por el virus.