Fernández tomó deuda por el 60% de lo que renegocia con el FMI
Asciende a US$26.196 millones; las negociaciones con el organismo de crédito internacional, tras su visita, continuarán por vía remota
Tras 11 meses de gobierno del Frente de Todos, el Ministerio de Economía dio a conocer el crecimiento de la deuda pública en el último mes: el aumento neto fue de 960 millones de dólares. Con este incremento, y según los reportes de la Secretaría de Finanzas, el acumulado de deuda pública bruta solamente durante este año escala a 26.196 millones de dólares, casi el 60% de lo que el Estado nacional le debe al FMI.
En la mañana de hoy, el organismo internacional concluyó su visita a la Argentina, en el marco de las negociaciones por los vencimientos de deuda. Luego de 10 días de reuniones, interrumpidas por el falso positivo de uno de los integrantes del equipo técnico, la misión encabezada por Julie Kozack regresará a Estados Unidos sin dejar grandes noticias sobre la reestructuración de las obligaciones. Así, la devolución del desembolso de casi 45.000 millones de dólares continúa sin resolverse. La Argentina representa un tercio de la cartera de créditos del FMI, seguida por Egipto, con 12,2%.
El gobierno de Mauricio Macri inicialmente había generado un acuerdo stand-by que implicaba un préstamo de 50.000 millones de dólares, que luego fue aumentado a 57.000 millones. Sin embargo, el FMI solo desembolsó tres cuartas partes de lo negociado (44.000 millones de dólares), debido a la incertidumbre generada por el cambio de gestión en 2019. Fue la vigésima primera vez que la Argentina solicitó financiamiento al FMI y la oportunidad con mayor capital. El ministro de Economía, Martín Guzmán, y su equipo se encuentran actualmente intentando reestructurar los pagos de la deuda para no afrontarlos en 2021.
Sin embargo, el problema de la deuda pública no se detiene en las obligaciones contraídas con el FMI, ni tampoco con otros organismos internacionales. El componente internacional en la deuda bruta del Estado solo se lleva el 21% del total. El resto es deuda nacional, y la mayor parte, el 64%, corresponde a títulos públicos emitidos por el Gobierno. Según el Ministerio de Economía, el 79% de la deuda bruta es nacional. Los títulos son, a su vez, el instrumento más utilizado (generaron dos de cada tres dólares). Las letras del Tesoro están en segundo lugar, con el 6%.
Desde el comienzo de la gestión de Alberto Fernández, la deuda pública creció el equivalente a casi el 60% de la deuda contraída con el FMI. La gestión del Frente de Todos ha logrado “reducir” esas obligaciones a 19.846 millones por la devaluación. Es decir, al Gobierno le costará menos afrontar esas obligaciones por haber generado una licuación del dinero debido a la suba del dólar este año. Este monto sigue siendo igualmente el equivalente al 45% de la deuda con el FMI.
El crecimiento de octubre fue debido principalmente a la colocación de títulos y desembolsos de préstamos. “Por primera vez en el año se licitaron bonos vinculados al dólar (dollar-linked), que sumaron 3426 millones de dólares”, explica un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso Nacional. Con los 960 millones netos sumados al déficit, la deuda pública de la Argentina ascendió a 333.146 millones de dólares. Solamente el 22,1% puede pagarse en pesos, según los últimos datos del Ministerio de Economía. Esto representa, con sus intereses, 8 puntos y medio del producto bruto interno.
Según fuentes cercanas al ministro de Economía, los pagos a abonarse el año que viene se financiarán con emisión monetaria. Esta política expansiva podría provocar un efecto de aumento de la inflación. Sin embargo, esto no fue contemplado en el presupuesto 2021, que estima un 28% de inflación para el año entrante. Desde el Banco Central alegan que este problema se agravará debido a la falta de acceso del país al mercado de deuda internacional, obstáculo que otros países endeudados por la pandemia no tendrán. El FMI, por su parte, reclamó a la Argentina una contracción de la política fiscal.