El Gobierno espera iniciar la vacunación en enero, pero todavía no hay certezas
El Ministerio de Salud reconoció que existen dudas sobre la provisión de las dosis por parte de los laboratorios; el objetivo es inocular a unos 12 millones de personas
Con la intención de inocular a más de 12 millones de personas lo antes posible, el Gobierno realizó ayer la primera reunión interministerial para poner en marcha la logística de la vacuna contra el coronavirus.
El ministro de Salud, Ginés González García, no quiso confirmar cuándo comenzará la campaña de vacunación, pero hizo una nueva estimación: “La primera quincena de enero”.
La semana pasada, la Casa Rosada había informado que el operativo comenzaría en diciembre.
Más allá de los anuncios, la disponibilidad de las vacunas todavía está envuelta de incertidumbre.
Por ahora, el Gobierno tiene un acuerdo firmado con la firma Oxford Astrazeneca y espera cerrar en los próximos días los convenios por la vacuna Sputnik V, de Rusia, y la suministrada por el laboratorio Pfizer.
“Respecto de la fecha, ojalá hubiéramos empezado ya, pero eso depende de la disponibilidad de las vacunas, que todavía no están aprobadas. Yo calculo que, con poco volumen, vamos a empezar en la primera quincena de enero, pero eso está absolutamente subordinado a que tengamos la vacuna”, dijo González García en medio de la confusión por los plazos de la campaña.
En definitiva, el Gobierno dijo que tendrá lista la planificación de la logística, pero reconoció que dependerá de los laboratorios el momento de ponerla en práctica. “Nosotros queremos vacunar a la mayor cantidad de personas cuanto antes, le estamos preguntando a cada empresa cuál es su máxima capacidad productiva. En enero no se va a llegar a la máxima capacidad, seguramente será en febrero y marzo”, reconoció el funcionario.
Los primeros grupos que serán vacunados, según los cálculos poblacionales que hicieron en el Ministerio del Interior, son los mayores de 60 años (casi 8 millones de personas), el personal de salud (763.000), el personal de las Fuerzas Armadas y de seguridad (500.000) y las personas de riesgo por enfermedades preexistentes (2.800.000). En total, una población de 12.063.000, si bien la inoculación no será obligatoria. Los menores de 18 años sin afecciones, en principio, no entrarían en estos grupos prioritarios.
Según trascendió, Alberto Fernández les encargó a los ministros que sumen a los docentes dentro de los grupos prioritarios, con la expectativa de retomar las clases presenciales en marzo.
La primera reunión del comité de vacunación tuvo lugar ayer en el Salón Eva Perón de la Casa Rosada. Fue encabezada por el Presidente y los integrantes del cónclave interministerial: el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; González García y Carla Vizzotti (Salud); Sabina Frederic (Seguridad); Agustín Rossi (Defensa); Eduardo de Pedro (Interior), y la asesora presidencial Cecilia Nicolini.
El ministro de Salud reconoció que la logística tiene “detalles técnicos complicadísimos”, tanto por la magnitud de población a cubrir como por los distintos tipos de vacunas que hay, que requieren distintas temperaturas de conservación, algunas a -70°C.
Rossi detalló que las Fuerzas Armadas aportarán, además de “medios aéreos y terrestres” para el traslado de la vacuna y de los insumos médicos, personal (médicos y enfermeros militares) y los cuarteles y destacamentos en todo el país para almacenar las dosis en las provincias.
Interior, según afirmó De Pedro, pondrá a disposición todos los dispositivos que se ponen en práctica en las elecciones, es decir, los padrones (con los domicilios de los mayores de 60, por ejemplo) y la logística que provee el Correo Argentino.
“Se va a escribir en la historia sobre esto, y no lo digo como gobierno, sino como comunidad”, dijo el jefe de Gabinete el sábado en declaraciones radiales. Cafiero destacó a los “voluntarios que se están inscribiendo” y reiteró que los primeros en recibir la vacunación serán los “pacientes de riesgo”, a quienes se sumarán los mayores de 60 años, y personal de salud y seguridad.
Desde el Gobierno aseguran que la “campaña de vacunación más grande de la historia” tendrá carácter federal. De hecho, una reunión pautada entre González García y los ministros de Salud provinciales también se había previsto para ayer, aunque fue postergada.
En el caso de las fuerzas de seguridad, tendrán un doble objetivo: por un lado, vacunarse ellos mismos (unos 90.000 entre la Prefectura, la PSA, la Gendarmería y la Policía Federal); por otro, colaborar con la logística y el despliegue territorial, que guarda puntos de comparación con los operativos electorales que se llevan adelante cada dos años.
Desde el Ministerio del Interior ya se avanzó a través del Registro Nacional de las Personas (Renaper) en el relevamiento de toda la población mayor de 60 años. “Se hizo pueblo por pueblo, en todo el país”, enfatizaron cerca de De Pedro.
El inicio del proceso logístico coincide con la etapa final de aprobación de las vacunas por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las agencias de cada país, con la Anmat como referente local. Desde el Gobierno afirman que no habrá “discriminación ideológica” y que se usarán todas las vacunas autorizadas por el organismo, sin importar de dónde vengan. “Puntualmente [la Argentina] ha trabajado absolutamente con todos los oferentes de la vacuna”, dijo el Presidente días atrás.
Cafiero anticipó que el Gobierno tiene la “expectativa de estar firmando el contrato la semana que viene” con la Federación Rusa para la provisión de 25 millones de dosis de la vacuna Sputnik V de ese país. Además, la empresa Astrazeneca (en conjunto con la Universidad de Oxford y el empresario Hugo Sigman) comenzó a presentar la documentación ante la Anmat para el registro de su vacuna.
Desde el Gobierno apuestan a la vacuna para impedir el retorno del virus en el próximo invierno.
Ginés González García ministro de salud de la nación “respecto de la fecha, ojalá hubiéramos empezado ya, pero eso depende de la disponibilidad de las vacunas, que todavía no están aprobadas. Yo calculo que, con poco volumen, vamos a empezar en la primera quincena de enero, pero eso está absolutamente subordinado a que tengamos la vacuna”