Jugar sin presión
Los Pumas ya dieron el golpe ante los All Blacks y ahora buscarán mejorar el rendimiento
Ya nunca más habrá que escribir que los Pumas van por la primera victoria ante los All Blacks. Que es difícil pero no imposible, que alguna vez se tiene que dar, que hay que hacer el partido perfecto y esperar algún error del rival, que si pasa esto y se evita aquello. Nunca más. Dos semanas atrás, los Pumas se sacaron la espina más punzante. Ahora sólo deben enfocarse en el juego.
No es que haber cortado la racha sin victorias ante Nueva Zelanda haga que el duelo de mañana sea más sencillo. Sigue siendo un cruce entre la máxima potencia en el planeta ovalado y un país emergente. con el triunfo en el debut y el empate ante Australia, una seguidilla que jamás había conseguido en nueve años de competir mano a mano con las potencias, los Pumas llegan a este encuentro parados en otra posición y hasta con la inédita posibilidad de pelear por el título.
En su tercer presentación en el Personal Tri-nations, los Pumas juegan la revancha con los All Blacks con el objetivo de confirmar su gran momento y mantenerse en la lucha por el título. Ninguna de estas dos metas exige necesariamente un triunfo. Pero que esta posibilidad haya dejado de ser inalcanzable habla del estado de gracia que alcanzó el equipo que conduce Mario Ledesma.
La definición del certamen quedará matemáticamente para la última fecha, aunque una victoria con punto bonus por parte de cualquiera –mañana, a las 5.45, en el Mcdonald Jones Stadium de Newcastle– equivaldrá a una conquista virtual, ya que Australia necesitaría una goleada sideral ante los Pumas en el partido final.
Un desafío para Mario Ledesma es ver cómo responde un equipo que cambió casi por completo, con diez modificaciones respecto al último encuentro. No debería ser un condicionante mayor teniendo en cuenta que la columna vertebral se mantiene (Sánchez, Matera, Kremer, Petti Pagadizábal y Montoya) y que varios de los que ingresan tienen sobrada experiencia en partidos de este nivel (isa, cordero, De la Fuente, Moyano, Boffelli).
Mayor reto será el de mantener el foco durante los 80 minutos como muy bien lo hicieron en el primer encuentro. Si entonces alcanzaron el triunfo, fue porque ejecutaron a la perfección las cuestiones esenciales del juego.