Ana María Picchio. “Cuando en Hollywood nominaban a La tregua, acá nos prohibían”
A 45 años de su nominación al Oscar como Mejor Película Extranjera, su protagonista recuerda el film de Sergio Renán
La tregua es sin dudas una película icónica, una de las mejores del cine argentino. Además se destaca por haber catapultado la carrera de varios actores, entre ellas, la de Ana María Picchio. Si bien en 1970 se había alzado con el premio a la mejor actriz en el Festival de Moscú por su debut cinematográfico en Breve cielo, el primer film de Sergio Renán como director significó para ella un antes y un después en su vida profesional. Y posiblemente también en la personal, habida cuenta de los intensos sentimientos que aún hoy la embargan cuando rememora la filmación de la novela de Mario Benedetti.
Pudo haber participado en más de 40 films (y también en tantos programas de televisión y obras de teatro), pero el personaje de Laura Avellaneda, la joven de 24 años que con su frescura le devolvía las ganas de vivir al oficinista viudo y a punto de jubilarse Martín Santomé, la acompañará por siempre como un amuleto. “He filmado muchas películas, y me han tocado papeles maravillosos a lo largo de todos estos años de trabajo, pero a Avellaneda la llevo grabada en mi corazón”, confesará al promediar la charla con la nacion, realizada con motivo de celebrarse los 45 años de la nominación de
La tregua al Oscar como mejor película extranjera.
–¿A qué obedece, según vos, la vigencia de la película?