Los Pumas y algo de aquella normalidad
Jorge Búsico
La última vez que los Pumas pisaron suelo argentino para jugar un test match fue el 10 de agosto de 2019. Ocurrió en Salta, ante los Springboks, con una derrota de 46-13, por la última fecha de un Rugby Championship reducido porque faltaban 40 días para el inicio de la Copa del Mundo de Japón. La ausencia en tierra propia se seguirá extendiendo al menos hasta julio del año próximo. La vuelta de la ventana de mitad de año –cancelada en 2020 por la pandemia–, en la cual los seleccionados del Sur habitualmente reciben a los del Norte, se vio alterada y ahora serán mayormente locales los europeos. Los Pumas mantienen el rival previsto, Gales, pero en Cardiff, y, por ahora, pierden el otro encuentro programado aquí, ante Georgia.
La pandemia sigue azotando al rugby argentino con muertes, internaciones, clubes cerrados, sin competencias, bajas de socios y jugadores y planes de alto rendimiento arrasados, pero los Pumas, dentro de este panorama, pueden visualizar la parte llena del vaso, ya que tienen el calendario de 2021 prácticamente completo. Eso sí: todo fuera del país. El Rugby Championship, que tendrá de regreso a los Springboks, se realizaría en Nueva Zelanda y Australia, que acaban de terminar sus respectivos Super Rugby con tribunas repletas de público. Y luego, en noviembre, la tradicional ventana en Europa, para la que hasta ahora están confirmados encuentros ante Francia e Italia y probablemente con Escocia.
Gales, actual campeón del 6 Naciones, no aceptó venir a la Argentina por una cuestión sanitaria. Su oferta de jugar los partidos en Cardiff significó, aunque no lo parezca, una solución para la UAR. Si los encuentros se disputaban acá, iban a ser sin público y la ecuación económica, en un momento de drástica reducción de ingresos, podría ser deficitaria. También hay un punto a favor en la organización del equipo: la gran mayoría de los titulares están jugando en Europa.
Julio será un mes en el cual el rugby internacional volverá a la gran competencia. Se jugarán 47 partidos en los que estarán involucradas 25 selecciones entre test, eliminatorias para Francia 2023 y el gran acontecimiento del año: la gira de los British&irish Lions por Sudáfrica. En esa franja, los Pumas enfrentarán a Gales en el Principality Stadium el 10 y 17. En tanto, Argentina XV tiene previsto jugar con Uruguay, en Montevideo, el 11. Para los uruguayos, la cancelación de la gira de los galeses fue mazazo, ya que había una posibilidad de recibirlos.
“Es una decepción no poder hacer la gira por la Argentina, especialmente después de que se cancelara la que íbamos a realizar a Nueva Zelanda el año pasado, pero la situación es comprensible y lo importante es tener partidos”, dijo ayer el neozelandés Wayne Pivac, entrenador de Gales. Para los encuentros con los Pumas, Gales no contará con 10 de sus figuras que fueron convocadas para los Lions, entre ellos su capitán, Alun Wyn Jones, quien también liderará al combinado británico-irlandés.
Para el equipo dirigido por Mario Ledesma será una muy buena prueba desde lo competitivo y, además, el primer ensayo con los jugadores desperdigados en distintos equipos. Aquella estructura ideal que se derrumbó el año pasado con el fin de Jaguares tendrá en julio una experiencia novedosa para el plantel, ya que no ofrecerá comparación con la puesta a punto que se realizó para el glorioso Rugby Championship 2020.
Aunque en los últimos días se instaló el temor por la circulación de la variante india, en el Reino Unido se está avanzando en la batalla contra el virus. El lunes por primera vez desde en más de un año no se registraron muertes por Covid en Inglaterra, Escocia e Irlanda (sí hubo cuatro en Gales) y a partir del próximo lunes habrá más altas en las restricciones. Para junio está prevista la presencia limitada en los estadios, por lo cual los test de los Pumas podrían jugarse con unas 10 mil personas en las tribunas. Un pedazo de la foto que veíamos antes.