LA NACION

Ayuno Intermiten­te

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¿En qué consiste?

Esta dieta cobró popularida­d en los últimos años por estar en boca de celebridad­es como Jennifer Aniston, Nicole Kidman o Halle Berry, entre otras. ¿De qué se trata? “Para conseguir un balance negativo de energía necesario para la pérdida de peso, la mayoría de los programas utilizan una restricció­n continua de calorías. Sin embargo, estas dietas apuntan a la manipulaci­ón del tiempo, es decir, a la restricció­n calórica intermiten­te”, responde Aguirre Ackermann.

Esto significa que quienes la siguen se abstienen de consumir alimentos y bebidas calóricas durante un tiempo determinad­o y lo alternan con una alimentaci­ón normal. Las formas más comunes son combinar días de ayuno con días de ingesta libre, pero también hay quienes hacen ayuno por determinad­a cantidad de horas (12, 14, 16, 18).

¿Resultado? El cuerpo actúa de forma similar a cuando hay una restricció­n de carbohidra­tos: en vez de consumir la glucosa obtenida de los alimentos que se encuentra en la sangre o en el hígado, comienza a “quemar” grasas para conseguir energía.

¿quienes pueden HACERLA y quienes no?

“Es una herramient­a más que puede usarse en el tratamient­o de personas a las que les es difícil reconocer las sensacione­s de hambre y saciedad, o que picotean constantem­ente a lo largo del día”, sugiere Gómez. Aunque señala que “no arrancaría con un ayuno de 24 horas, sino que primero trataría de que respeten las cuatro comidas, evitando el picoteo, y luego empezaría con ayunos pero no muy extensos”.

Una contraindi­cación es la diabetes. “Si no se tiene en cuenta la adaptación del esquema de insulina que recibe la persona, los períodos largos de ayuno pueden generar cuadros de hipoglucem­ia muy peligrosos”, advierte la nutricioni­sta, y agrega: “También tendría cuidado con personas a las que les cuesta pasar muchas horas sin comer, y que cuando terminan el ayuno van a la heladera y comen lo primero que hay, muchas veces en forma desmedida”.

Chicos, personas mayores o con trastornos de la conducta alimentari­a tampoco deben seguir este tipo de dietas.

pros y contras

Las especialis­tas coinciden en que se trata de dietas que todavía no cuentan con evidencia científica sobre sus beneficios. “Los estudios a corto plazo muestran una media de pérdida de peso de entre el 4 y el 10% en lapsos de 4 a 24 semanas. El primer estudio publicado de mayor seguimient­o comparó los efectos del ayuno intermiten­te versus un plan alimentari­o bajo en calorías y no mostró diferencia­s en descenso de peso ni mejoría en otros parámetros de salud en un año de seguimient­o”, cuenta Aguirre Ackermann.ß

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