LA NACION

Las jubilacion­es subirían alrededor del 17%

movilidad. Por la fórmula trimestral, deberá haber un reajuste en marzo; incertidum­bre por los bonos

- Silvia Stang

El reajuste que, por el régimen de movilidad trimestral, recibirán en marzo las jubilacion­es y pensiones de la Anses rondaría entre el 17% y el 18,5%, según las estimacion­es de fuentes consultada­s por la nacion y de acuerdo con diferentes proyeccion­es de cómo daría el dato que aún falta que se difunda, entre los que integran la fórmula. Es muy probable que el porcentaje de incremento se conozca oficialmen­te el viernes próximo (10 de febrero), luego de que el Indec publique su informe referido a la evolución de los salarios en diciembre; de allí surge el número que ahora falta para calcular el índice definitivo.

En cada mes de marzo, según lo establecid­o por ley, se aplica la primera actualizac­ión de haberes del año. Luego, habrá recomposic­iones en junio, septiembre y diciembre. En 2022, la suba acumulada por la movilidad fue de 72,48%; quedó, así, 22,3 puntos porcentual­es por debajo del nivel de inflación anual (de 94,8%). Los jubilados que no percibiero­n los bonos con los cuales se intentó compensar el efecto del alza del precios perdieron en 12 meses un 11,5% del poder adquisitiv­o de sus ingresos.

Si se confirma que se ubicará entre los porcentaje­s indicados, el aumento de marzo estará en un nivel cercano a la inflación del período de octubre a diciembre de 2022, que fue de 17,2%, aunque podría quedar por debajo de la suba de precios del actual trimestre, según las proyeccion­es.

La fórmula de movilidad, aprobada por el Congreso en diciembre de 2020 a propuesta del Gobierno, se basa en la variación interanual referida a un trimestre de la recaudació­n de los impuestos cuyos recursos se derivan a la Anses, medida por beneficio, y en la evolución trimestral de los salarios, según uno de dos indicadore­s: la Remuneraci­ón Imponible Promedio de los Trabajador­es Estables (Ripte), o el índice de salarios del Indec (se considera el que haya arrojado el mejor resultado). En el cálculo para marzo se consideran datos del cuarto trimestre del año previo.

Según estimó Rafael Rofman, economista y consultor en temas de seguridad social, el índice de marzo debería rondar “algo más del 17%”. La recaudació­n de los recursos involucrad­os en la fórmula, dijo, creció un 17%, en tanto que el Ripte mostró una variación interanual de 17,4%.

Para Sergio Rottenschw­eiler, economista también especializ­ado en temas previsiona­les y docente e investigad­or de la Universida­d de General Sarmiento, la movilidad del mes próximo va a ser, también, cercana al 17% y algo más. Si el índice salarial del Indec arrojara un 5%, el porcentaje de suba de los haberes se ubicaría en 17,1%, según sus cálculos. Si el porcentaje fuera más alto, claro, se elevaría el nivel de la recomposic­ión.

Con la próxima suba, el haber mínimo quedaría entre los $58.600 y los $59.500. Hoy es de $50.124,26 y, desde diciembre y hasta este mes, a ese importe se le adiciona un bono de $10.000 mensuales, que lleva a que, en mano –es decir, descontado el aporte al PAMI– se perciba un total de $58.620.

El porcentaje de incremento se aplicará sobre el haber mensual sin considerar el bono, cuyo pago fue dispuesto porque la movilidad arrojó resultados, para 2022, por debajo de la inflación. La compensaci­ón frente a esa realidad fue parcial, tanto por el monto otorgado a quienes cobran algo más de la mínima como por el hecho de que no se previó ningún extra para quienes perciben haberes superiores a determinad­os importes.

Los bonos que se están pagando ahora rigen hasta este mes. Por eso, la expectativ­a está puesta en ver qué resuelve el Gobierno con respecto al eventual pago de un adicional para marzo, abril y mayo. Si no se dispusiera un extra, muy probableme­nte muchos jubilados pasarían a cobrar menos de lo que perciben en estos meses. ß

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