DC busca copiar el exitoso modelo de su rival Marvel
Con James Gunn como líder y nuevos rostros para sus superhéroes
A mediados de los 2000, Kevin Feige soñaba con llevar al cine a los principales superhéroes del universo Marvel. Los planes de ese productor novato consistían en replicar las fórmulas de las historietas: lanzar primero las películas individuales de Iron Man, Thor y el Capitán América, para luego unirlos a ellos y a otros héroes en un gigantesco film titulado Los Vengadores. Mientras otros productores consideraban absurdo plantear un cosmos de películas compartidas, Feige avanzaba. Una década más tarde, el método Marvel era un éxito.
En la vereda opuesta, DC intentaba sin éxito repetir ese esquema. Batman vs. Superman: el origen de la justicia o Escuadrón suicida establecieron de forma desprolija una continuidad que culminó con Liga de la justicia, una obra absolutamente fallida. Era claro que en DC faltaba una figura equivalente a Feige.
James Gunn revolucionó en 2014 el cine de superhéroes con Guardianes de la galaxia, una comedia despreocupada que combinaba melodías pop con grandes escenas de acción, pero que también mostraba una construcción minuciosa de un entrañable equipo de héroes. Su carrera posterior en Marvel (y en DC, con la segunda parte del Escuadrón suicida) lo convirtió en el nombre ideal para ser el coordinador del que es un ambicioso plan de películas y series basadas en figuras de DC que fue anunciada esta semana.
James Gunn y el productor Peter Safran revelaron una primera fase del Universo DC, a la que denominaron Dioses y monstruos, integrada por cinco largometrajes y cinco series. Atención: este plan no cambia el rumbo de proyectos en marcha, como The Batman II o Joker: Folie à Deux, que quedarán fuera de esa continuidad compartida.
Se destaca entre los anuncios Superman: Legacy. Luego de anunciar que Henry Cavill no interpretaría más al kryptoniano, esta nueva versión de Superman es el caballito de batalla de Gunn y su equipo. Gunn será el encargado de escribir el guion y Warner busca también que lo dirija, aunque eso no está confirmado. Se sabe que la trama profundizará en cómo Clark Kent busca equilibrar su herencia kryptoniana con su crianza como terrícola. Es el único proyecto con fecha de estreno confirmada: el 11 de julio de 2025.
Con The Brave and the Bold, Gunn tendrá su propia versión de Batman, que adaptará parcialmente la etapa escrita por Grant Morrison, quien introdujo en la vida de Bruce Wayne a un hijo biológico de diez años, producto de una breve relación con Thalia Al Ghul (interpretada por Marion Cotillard en la trilogía de Christopher Nolan). Criado entre asesinos y mercenarios, Damian Wayne está muy lejos de ser un héroe; por ese motivo, cuando descubre que su padre es Batman, se produce entre ambos un curioso enfrentamiento. Decidido a heredarle su sentido de la ley, Bruce convierte al niño en Robin.
La gran sorpresa del panel fue The Authority. Bajo el liderazgo de una pragmática justiciera llamada Jenny Sparks, el grupo es una suerte de policía mundial que protegía a la Tierra de amenazas sobrenaturales o invasiones alienígenas a través de la fuerza bruta y de un carisma que pronto enamoró a los lectores.
Así como Batman tendrá un contrapunto con Robin, una nueva Supergirl pondrá en crisis los valores de Superman. Gunn aseguró que esta Supergirl será una heroína drástica en su forma de impartir justicia. Por otro lado, con la tercera entrega de La mujer maravilla cancelada –atentos al gancho que tuvo esa heroína gracias a Gal Gadot– Gunn y Safran presentaron Paradise Lost, una miniserie que servirá de precuela a las películas de Patty Jenkins (aunque sin contar con ninguna de ellas). Aquí el tono de la premisa será en la línea de Game of Thrones, con todo tipo de intrigas palaciegas en la isla de Themyscira.