Revelan detalles sobre el presunto plan de golpe de Bolsonaro
Un senador describió a la Justicia la reunión conspirativa a la que habría asistido el expresidente
BRASILIA.– El senador opositor brasileño Marcos do Val reveló que un cercano colaborador del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro intentó convencerlo de unirse a una conspiración para anular las elecciones de octubre ganadas por Luiz Inacio Lula da Silva.
Do Val explicó en una conferencia de prensa que un aliado de Bolsonaro le pidió, en una reunión con el entonces presidente, que consiguiera que la máxima autoridad electoral, el juez Alexandre de Moraes, hiciera comentarios comprometedores en una conversación grabada que llevaría a su arresto.
Bolsonaro “se sentó en silencio” mientras el exlegislador Daniel Silveira sugería el plan, reveló el senador. Moraes ordenó a la Policía Federal tomar el testimonio jurado de Do Val en un lapso no mayor a cinco días. Bolsonaro, que mantuvo una vida discreta en el estado de Florida desde el 30 de diciembre, no comentó al respecto en ninguna de sus redes sociales.
La revista Veja publicó ayer los mensajes a los que tuvo acceso, la prueba más contundente hasta ahora para respaldar las acusaciones de que Bolsonaro intentó anular el resultado de las elecciones en las que perdió ante Lula, que asumió el cargo el 1° de enero.
El plan supuestamente consistía en que alguien de confianza del presidente se acercara a Moraes, presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), debidamente equipado para grabar las conversaciones del magistrado a fin de captar algo comprometedor que sirviera de argumento para arrestarlo.
En una reunión en el Palacio de la Alvorada, Bolsonaro supuestamente expuso los detalles de esta operación en una reunión con el diputado Daniel Silveira (PTB) y el senador Marcos do Val (Podemos). El rol del expresidente no está claro. Luego Do Val dijo que simplemente escuchó en silencio.
La preparación del encuentro estuvo rodeada de un cuidado extremo. A sugerencia de Silveira, se acordó que él y el senador se referirían a la reunión solo por código. El día señalado, el diputado envió un mensaje de audio a Do Val para indicarle cómo llegar al destino, discretamente, sin ser visto: “Te mando mi ubicación, pero no entres. Y ni siquiera te acerques a la entrada. No aparezcas. Vas a frenar el auto en el estacionamiento y te mando la ubicación. Voy a estar ahí. Un auto va a venir a buscarnos”.
La reunión con el presidente duró unos 40 minutos. Supuestamente se celebró el 9 de diciembre y Bolsonaro recibió a los visitantes vestido con pantalón corto, remera de manga corta y chancletas. Los tres hablaron sobre varios temas, desde el acampe de los manifestantes frente al cuartel hasta el presunto fraude en el proceso electoral. En ese momento, supuestamente, intervino Silveira, que dijo que el senador era una persona de su confianza y le pidió al presidente que presentara la idea que “salvaría a Brasil”.
Bolsonaro y sus asistentes atribuyen la derrota del presidente a la injerencia de Moraes durante la campaña electoral. Creían que podrían probarlo si lograban acercarse al magistrado y grabar sus conversaciones. Do Val quería saber cómo se haría esto. Bolsonaro dijo que ya había acordado con la Oficina de Seguridad Institucional (GSI), el órgano responsable de la seguridad del presidente.
Al día siguiente de la reunión, Silveira envió una serie de mensajes al senador exigiendo una respuesta. En uno de ellos reiteró que solo tres personas sabían del plan, y dos más –militares– solo se enterarían después de la conclusión de la primera etapa de la operación ”cinco estrellas”.ß