Condenan al diplomático que espió para Cuba
Víctor Rocha estuvo a cargo de la embajada de EE.UU. en la Argentina entre 1997 y 1999
MIAMI (AFP).– Victor Manuel Rocha, un exembajador de Estados Unidos en Bolivia que también estuvo a cargo de la embajada en la Argentina en los 90, fue condenado ayer a 15 años de prisión por actuar como agente encubierto de Cuba durante cuatro décadas, en una audiencia celebrada en un tribunal federal de Miami.
“El tribunal va a sentenciarlo al máximo castigo permitido por ley”, declaró la jueza Beth Bloom, antes de anunciar la sentencia de cárcel a la que sumó el pago de 500.000 dólares de multa.
Rocha, de 73 años, compareció por la tarde ante la jueza Beth Bloom en una audiencia que duró tres horas y media. El exdiplomático, que alcanzó un acuerdo de colaboración con la Fiscalía, se declaró primero culpable de haber recopilado información de inteligencia estadounidense para el gobierno comunista de Cuba desde alrededor de 1981. Después de que reconociera esos hechos, la jueza Bloom lo condenó.
La policía estadounidense detuvo a Rocha en Miami en diciembre y lo acusó de actuar como agente de un gobierno extranjero sin el consentimiento previo de su administración.
En sus años como topo, ocupó cargos importantes en el Departamento
de Estado, desde donde pudo acceder a información confidencial de alto nivel e influir en la política exterior estadounidense.
Nacido en Colombia y nacionalizado estadounidense, Rocha llevó a cabo “una de las infiltraciones de mayor alcance y duración en el gobierno de Estados Unidos por parte de un agente extranjero”, dijo en diciembre el fiscal general Merrick B. Garland.
Entre julio de 1997 y noviembre de 1999, Rocha se desempeñó en Buenos Aires como la máxima autoridad diplomática estadounidense, mientras no se designaba embajador, como Jefe Adjunto de la Embajada de Estados Unidos.
En marzo de 1998 se pronunció en Buenos Aires sobre uno de los temas políticos más candentes de ese momento: la posibilidad de que el presidente, Carlos Menem, se lanzara en busca de un tercer mandato.“existe una Constitución y existe un compromiso del presidente de ser fiel a esa Constitución”, afirmó.
Entre 1999 y mediados de 2002, fue embajador en La Paz, donde causó una gran polémica al amenazar con retirar la ayuda estadounidense a la guerra boliviana contra las drogas, si el izquierdista y exsindicalista cocalero Evo Morales ganaba las elecciones.