“No nos podemos dormir en un lateral; es un error injustificable”
Jacobo Mansilla, con bronca en sus declaraciones, admitió que el segundo gol de Quilmes llegó por una distracción fatal. “Nos quedamos parados, nadie marcó. La culpa fue de todos”.
Sergio Daniel Peyssé nte Quilmes quedó demostrado que Jacobo Mansilla, el jugador que, según el GPS, es el que más kilómetros recorre en cada presentación de Olimpo, tiene que jugar en el medio, en la posición que le encontró Cristian Díaz, “de volante interno”, tal como denomina el entrenador a los laderos de Lucas Villarruel en la zona central de este elenco aurinegro que perdió 2-1 ante el cervecero sosteniendo su mejor partido de visitante en el torneo.
A ver... El andamiaje colectivo del conjunto bahiense mejoró cuando Jacobo, en el inicio del segundo tiempo, dejó el lateral izquierdo, donde fue totalmente desaprovechado, y pasó a jugar de volante bien adelantado. Se asoció constantemente con Pizzini, ganó varios rebotes, cortó pases en tres cuartos, buscó varias descargas de Coniglio y fue el que más centros certeros volcó al área del dueño de casa.
Si Mansilla no se cansa, a Olimpo no se lo puede dar por muerto. Por su empuje y su pegada, Olimpo tuvo en jaque al quilmeño en la etapa
Acomplementaria, aunque nada alcanza si los goles que merecés hacer no los hacés. Eso sí, el DT puede seguir probando y analizando cambios posicionales, pero al 19 ya no lo puede correr más de ese lugar que ocupa en la cancha. Y menos que menos retrocederlo de “3”.
“Es cierto que en el medio es donde Jacobo más rinde. Pero faltaban Quiroga y Villanueva y el jugador que más se adapta a esa posición es él. Viendo el partido desde una cabina (tenía una fecha de suspensión y la cumplió) entendí que tenía que volver a la zona de volantes, y por eso el equipo mejoró. Y sí, lo voy a pensar antes de ponerlo otra vez a marcar el lateral izquierdo”, sostuvo el orientador CD.
La misma sensación que tuvo el entrenador olimpiense la percibí yo en la cancha, y seguramente es lo que sintió el propio Jacobo Mansilla cuando pasó a la posición donde más cómodo se siente y donde más créditos le puede aportar a la ofensiva de su equipo.
”El técnico me pidió jugar de lateral y no tengo problemas en hacerlo. En el primer tiempo no tuvimos volumen de juego, no pudimos hacer girar la pelota para que los laterales se lancen al ataque, y eso me perjudicó porque muy pocas veces me pude desprender y sumarme al circuito de juego del equipo.