Una historia de 80 años se vive en el Parque Ernesto Tornquist
A través de diferentes actividades recreativas, educativas y turísticas, la institución provincial celebrará entre el jueves y el domingo próximos.
Al hablar de conservacionismo y turismo, el Parque Provincial Ernesto Tornquist representa uno de los mojones más importantes de la provincia de Buenos Aires, no sólo para el distrito, sino para una amplia región.
Desde su creación, el 11 de mayo de 1937, las 6.707 hectáreas que comprende la reserva atravesaron por diferentes procesos y administraciones, lo que generó épocas de esplendor y también de desidia y abandono.
En los últimos años, el PPET pudo recuperar la ad- ministración del lugar, permitiendo realizar una importante puesta en valor.
El secretario de la Agencia de Desarrollo del municipio de Tornquist, Gonzalo Iparraguirre, sostuvo que llegar a los 80 años de vida del PPET, genera un sentido de pertenencia importante para todos los habitantes.
“Hoy más que nunca, el PPET tiene una relevancia más que importante en materia turística y en lo que respecta a la preservación de un área protegida. Cuando hablamos de desarrollo turístico, sin dudas que nuestra reserva ocupa un lugar preponderante, como también lo es en materia de estudio e investigación”, manifestó Iparraguirre.
“Este área natural nos permite saber cómo era el lugar hace cientos de miles de años atrás. El pastizal pampeano, sabemos,es del bioma nativo de la provincia de Buenos Aires, de la Pampa argentina y el PPET representa justamente eso”, agregó.
“La familia Tornquist (quien donó las tierras), vieron en este lugar un atractivo natural único. Hoy, la puesta en valor del Cerro Ventana representa un atractivo especial a la provincia, no sólo por su belleza, sino por contar en el medio de la pampa con cuerpos montañosos que se destacan por sobre todo lo demás”, remarcó.
“En materia educativa, el PPET es y ha sido anfitrión de muchos investigadores, educadores e intérpretes del patrimonio. Aún continúan los estudios realizados por biólogos, geólogos, antropólogos e ingenieros forestales, entre otros, donde la información que hoy contamos de este lugar ha salido de un proceso investigativo que lleva 80 años”, añadió.
Las investigaciones, permitieron establecer que el parque es el hábitat de las iguanas de cobre que, por lo general, suelen ser avistadas en primavera y verano y cuenta con al menos tres especies vegetales también consideradas como endémicas: el Llantén plateado, Festuca ventanicola y Senecio ventanensis.
En cuanto a la posibilidad de poder recuperar la administración de los recursos económicos que genera para ser reinvertidos en el lugar, Iparraguirre señaló que fue clave tal decisión.
“Con el dinero recaudado se afrontan reformas, mantenimiento, acondicionamiento de los caminos de acceso, mejoras de la sala de interpretación y los baños, instalación de internet y cámaras de seguridad. Además, se colocó una cámara frente a los portones del Cerro Ventana, la cual sale todos los días por el canal TN de Buenos Aires”, explicó.
El PPET fue constituido con objetivos biológicos, y posee un jardín botánico que estudia y protege varias especies endémicas y raras.