Básquetbol. Juan Espil y Hernán Jasen analizaron el futuro de Lucio Redivo en España.
Los dos nuestros con más recorrido en la elite de España dijeron cómo ven al ex Bahía Basket para insertarse en Bilbao, su futuro equipo.
“Tendrá que adaptarse a tirar 4 o 5 pelotas por partido. Me pasó venir de tirar 25 tiros y cuando tirás 4 y no la metés creés que no podés jugar”, dijo Espil.
León Najnudel llevó de la mano a Hernán Montenegro a Zaragoza, cuando aún era un espigado juvenil de apenas 17 años. Corría 1993 y el “Loco” no pudo nacionalizarse, por lo que se quedó con las ganas de jugar en el CAI.
Más tarde, Juan Espil hizo trascender a Bahía Blanca en España.
Debutó en la temporada 1996-97, jugando para Tau Cerámica, huella que en la elite siguieron los bahienses Pepe Sánchez, Hernán Jasen, su hermano Juani, Alejandro Montecchia, Sebastián Ginóbili y Nicolás Richotti.
Ahora es el turno de Lucio Redivo, que “saltará el charco” para vincularse a Bilbao (España), en principio, por dos temporadas con opción a una tercera.
El escolta tirador priorizó lo deportivo ante el beneficio económico -inmediato-, que le significaría continuar en la Liga Nacional. “Lo encuentra con una muy buen edad (23 años). Hoy no debe pensar tanto en el dinero, sí en mejorar, algo que será un gran desafío. Es el momento de dar el salto”, entendió Juan Espil.
“Es muy auspicioso, más que nada porque su mentalidad pasa por trabajar y mejorar. Y eso está ante todo”, destacó Hernán Jasen.
Cuando emigró de la Liga Nacional a la ACB, Espil promediaba 31,3 puntos jugando para Atenas de Córdoba.
“Lucio tendrá que adaptarse a tirar 4 o 5 pelotas por partido; no podrá tirar mucho. A mi me pasó venir de tirar 25 tiros, y cuando tirás 4 y no la metés creés que no podés jugar. Eso sí, el día que tenés tiempo en cancha debés aprovecharlo”, opinó Juan.
Lucio se va con 17 puntos de promedio en la Liga, producto de 123-384/32% en triples, 247-487/50,7% en dobles y 142-165/86,1% en libres.
“Poder jugar en un básquet tan competitivo lo va a ayudar muchísimo. Lo hará más completo, porque no sólo tendrá que anotar, sino que deberá tener mayor disciplina de juego y otra lectura. Va a la liga más fuerte de Europa. Después de la NBA, me animo a decir la mejor del mundo”, aseguró Pancho.
“Tendrá un año de transición y deberá demostrarse a él mismo que puede. Necesitará ir cambiando la mentalidad, la forma de jugar y la intensidad”, enumeró Espil.
Lucio mide 1m79 y pesa 74,7 kilos.
“Tendrá que jugar más que nada con el físico y utilizarlo mejor. Eso se lo dará la propia competencia, en el día a día, porque va a competir con jugadores muy fuertes. Le llevará un tiempo entenderlo, como a todo joven, hasta conocer su nivel de dureza”, señaló Pancho.
Está claro que Redivo se verá obligado a modificar su juego.
“A ese nivel tenés que ser un jugador sin pelota, jugar para los demás... Es otro básquet, es más defensivo, hay más scouting. Tenés que estar más lúcido a la hora de ver las diferentes formas de defender”, avisó Espil.
El sistema de competencia puede beneficiar al bahiense en su desarrollo.
“Allá se entrena más de lo que se juega. Para mí es bueno, porque en el día a día se van corrigiendo cosas que a esta altura de la carrera de Lucio y para la edad que tiene es muy bueno. Se encuentra en una etapa de crecimiento”, opinó Jasen.