Aseguran que no perdió alumnos la educación especial
La mitad de estos chicos concurre a escuelas públicas comunes, según datos oficiales. Además del docente de grado, cuentan con la ayuda de maestras integradoras.
Más de 2.000 alumnos especiales acuden a diferentes establecimientos del distrito de Bahía Blanca y, si bien a fines del año pasado se puso en marcha una reestructuración de la matrícula, ninguno ha quedado afuera del sisNueva.” tema, sostuvo a “La Inspección Distrital de Educación.
La reestructuración de la “discordia” apunta a tres grandes franjas: quienes estaban doblemente matriculados (por ejemplo, disminuidos visuales y motores, que debieron pasar a un solo establecimiento); los mayores de 14 años, que deben integrarse a centros de formación integral; y aquellos provenientes de la zona, que deben concurrir a las propias escuelas de sus localidades.
A partir del reacomodamiento establecido según la Resolución 4418/11 --es decir, data de seis años-- un total de 1.003 chicos se encuentran en niveles Inicial, Primario, Secundario, Adultos y Formación Profesional de instituciones comunes. O sea, son chicos especiales que en escuelas estatales comunes poseen un maestro integrador, además del docente de grado.
Por otro lado, 465 concurre a las escuelas 503, 504, 505, 506, 507, 508, 509, 510, 512, 513 y 514, mientras que 364 acuden al Centro de Formación Integral y 56 están incluidos en los niveles secun- dario, adultos y formación profesional.
Finalmente, 183 niños pequeños, en edad de Inicial, asisten a los centros de atención temprana.
“Del mismo modo que algunas escuelas vieron disminuida su matrícula, otras la vieron acrecentada siguiendo lo señalado por la ley y es lógico que también hubo movimiento de personal”, expresa un comunicado del organismo que conduce Inés Petris.
De esta manera, agregó, fue autorizada la reasignación de 25 cargos docentes: además de maestros especiales propiamente dichos, maestros de huerta, de música, terapistas ocupacionales, preceptores, intérpretes de lengua de señas, etcétera.
Para Petris, el descontento que generó la desarticulación de algunas escuelas especiales tiene origen en esta propuesta organizativa del área que, si bien no es nueva porque data de 2011 , se im- plementó hace muy poco y de manera contundente.
“Se tiende a la inclusión en escuelas comunes, aunque cada caso se analiza en particular”, puntualizó, para agregar que no se trata de un tema presupuestario sino de normativa.
Recalcó que todas las escuelas especiales deben atender distintas especificidades y que eso conlleva una reformulación profunda.
Por citar un ejemplo y de acuerdo con el testimonio de muchos padres, la más perjudicada resultó la Escuela Especial 507, donde concu- rren chicos disminuidos visuales. A fin del año pasado los padres protestaron frente a Inspección Distrital de Educación, en Moreno al 200, debido al recorte que dejó este año a más de la mitad de la matrícula fuera del establecimiento, aunque incluidos en otros.
Agustín, de 14 años, quedó afuera. “La escuela es un soporte fundamental para nuestros hijos, que si bien también acuden a otras, como chicos integrados, en esta se les brindaban talleres específicos”, sostuvo María Belén, su mamá.
Si bien se aplicó este año, la reestructuración se encontraba prevista en una resolución del año 2011. “Se tiende a la inclusión en escuelas comunes”, dijo Petris.