Hacia dónde orientarse durante los próximos años
“Bahía tiene elementos a favor: industrias como las del Polo Petroquímico, donde se anunciaron proyectos de inversión, así como los relacionados con las energías renovables. Otra clara fortaleza pasa por las iniciativas en marcha en el área de Vaca Muerta. Por eso, yo creo que las firmas bahienses deberían tratar de orientarse con más fuerza a esa zona, para prestar servicios”, adelantó Rodrigo Álvarez.
Para el economista bahiense, socio y director de la consultora económica Analytica, los puntos flacos pasan por el rezago que muestra el consumo con respecto al resto de las variables económicas.
“Donde se ve menor dinamismo es en el consumo, que sigue estando muy atrasado, y eso afecta negativamente a la ciudad. Si las familias no experimentan un crecimiento de importancia en los ingresos y el empleo, que no está reaccionando rápidamente, las actividades vinculadas al gasto doméstico van a seguir relegadas”, alertó.
Estimó que “la reacción que va a llegar en 2018 no va ser contundente. Pese a ello, promediando el año, los indicadores relacionados con el mercado laboral deberían mejorar. Por un lado, esto dependerá en mucho de los proyectos públicos y privados en danza y, adicionalmente, de la evolución de la tasa de inflación”.
Es que sólo la combinación de mejoría en el nivel de empleo y suba del poder de compra de los salarios podrán reanimar el gasto de los hogares, incentivando así al consumo, uno de los grandes motores de la economía local.
“Y respecto del poder de compra, la inflación va a descender de manera más contundente desde la segunda mitad de 2018, porque vamos a tener una primera mitad con aumentos en servicios con baja posibilidad de sustitución, que van a resentirla”, detalló.
“No hay que perder de vista que estamos en una economía en transición de un modelo fuertemente ligado al consumo a otro liderado por la inversión. Y, en ese proceso, se deben curar las heridas que dejó la gestión anterior, como la quita de subsidios a las tarifas de los servicios públicos y la necesidad de seguir bajando, en forma paulatina, el déficit del sector público. Por eso existe una sensación de que la economía despega con lastre”, señaló.
Según Rodrigo Alvarez, promediando el 2018, los indicadores relacionados con el mercado laboral deberían mejorar. En ese etapa bajaría más fuerte la inflación.