Se cierra la esquina... y parte de una larga historia
Del anuncio de la construcción de un novedoso apart hotel, en 1977, a muchos años de desidia y abandono.
O'HIGGINS Y SAAVEDRA
A 40 años del inicio de los trabajos, comenzó a cerrarse la historia de una esquina estratégica desde lo urbano y comercial, como es la de O'Higgins y Saavedra.
Por estas horas, una terminación vidriada va envolviendo a los tres primeros pisos que materializan esa esquina, cuyo destino todavía no está definido pero que conforma un conjunto independiente del resto del complejo edilicio.
La historia de la obra data de septiembre de 1977, cuando la firma Di Tullio anunció la construcción de un novedoso apart hotel, el primero en su tipo en el sur.
Bautizado Bahía del Sol, fue presentado como un edificio “no convencional”, ya que permitiría a los posibles inversores comprar departamentos en un inmueble que funcionaría como un hotel cuatro estrellas. El complejo estaba vinculado a la plaza del Sol (actual plaza Ricardo Lavalle), descripta como “la más moderna del país”, diseñada en parte de los terrenos que ocupara el viejo mercado de abasto, demolido en 1968.
La obra contaría con 202 departamentos y suites, ambientes alfombrados y amueblados, calefacción central y aire acondicionado. Los ascensores tendrían vista al exterior, habría una confitería y sala de reuniones en el pri- mer piso y dos restaurantes panorámicos en el último. A esto se sumaría una piscina con solarium y locales comerciales en planta baja, con télex y música funcional.
El Bahía del Sol no superó los tres pisos de su estructura. Problemas económicos de la firma llevaron a su definitiva cancelación, en 1980.
Pasaron tres décadas hasta que nuevos propietarios e inversores retomaron la cons- trucción, reconvertido en un convencional edificio de departamentos de uno y dos dormitorios. Los pisos inferiores, que se están cerrando ahora, no tienen asignado todavía un uso. Hubo una idea de montar un centro comercial; luego oficinas administrativas y hoy se mantiene cierta incertidumbre.
Lo importante es haber recuperado una esquina que generaba un penoso paisaje urbano, un lugar donde además se registraban incidentes.
Una cosa es cierta: tampoco la economía ha ayudado a concretar este tipo de emprendimientos. En 1977, cuando se anunció el proyecto, estaba vigente el Peso Ley 18.188 y un dólar equivalía a 500 pesos. Desde entonces el peso ha resignado 15 ceros y la moneda norteamericana acaricia los 20 pesos.