Olimpo no pudo aguantar el ritmo que impuso River en el segundo tiempo
River fue otro de los equipos que dejó atrás la crisis futbolística venciendo al aurinegro. “Nacho” marcó dos golazos de PlayStation, pero con el primero el partido ya se había terminado.
EL DE BAHÍA SIGUE A LA DERIVA
Algunos de los equipos que atravesaron “crisis” futbolística en esta Superliga, se recuperaron frente a Olimpo.
Lo hicieron Newell’s, Gimnasia, Vélez y Patronato. Y ayer fue el turno de River, que le ganó por el peso propio de futbolistas consagrados y jerarquizados.
Hay que admitirlo: hubo demasiadas diferencias en- tre un elenco y otro, y el resultado quedó corto. Y es hasta lógico. En la cancha, en el banco y donde sea, el “Millo” lo triplica en presupuesto y eso se notó en 90 minutos.
La visita contó con 9 minutos de aire fresco, y sólo en ese pequeño lapso tuvo la idea fija de que lo podía ganar. Fueron sólo aproximaciones forzadas y algún remate que a Armani no le hizo ni cosquillas.
Después de ese comienzo, Olimpo se abroqueló atrás con un férreo 4-4-2.
Y River, con el control de todo, gravitó. Cuando Scocco y el Pity Martínez parecieron como fantasmas detrás de los volantes aurinegros, apareció Carranza para mantenerlo con vida.
Olimpo ni siquiera pudo aprovechar una mínima ventaja de un piso deslucido y desparejo.
Y este conjunto de Gallardo cuenta con un jugador que rompe los esquemas. Ignacio Scocco apretó circulo y cruz, como en la PlayStation, y clavó un tiro libre "Monumental".
Al rato, presionó turbo y empezó a esquivar muñecos, unos cinco, y se metió hasta el arco de Carranza con pelota y todo.
Si Ponzio es el equilibrio justo entre las líneas, Martínez Quarta tiene futuro de Selección, pero el que le dio los tres puntos fue Nacho. El sólo le mojó la oreja a un Olimpo flaco en números y con la fi- nanzas de puntos en rojo.
El sólo le va a poder contar a sus hijos y nietos que lo que hacés en la Play no es tan irreal como parece. Marear, como se decía antes, a tantos rivales y hacer un gol maradoniano, hoy es casi imposible hacerlo en el fútbol argentino. Scocco lo hizo, y sólo a Olimpo se lo pueden hacer...
El de Núñez fue otro de los que abusó de este Olimpo al le cuesta horrores crear juego, convertir y sumar.
Ahora se viene Racing. ¿Qué más se puede pedir? Tiene que ganar para no entrar en terapia intensiva ni empezar a depender de un respirador artificial.