Las claves
1
falta de rebeldía. Este equipo de Olimpo carece de personalidad para afrontar su difícil presente. Ante Central, se cayó anímicamente ante la primera adversidad y no logró torcer jamás el rumbo del trámite. Temperley, en una situación muy parecida en la tabla de los promedios, mostró ante dos grandes (Boca e Independiente) un mayor temperamento para pelear los partidos.
2
pelotas paradas. Christian Bassedas continúa sin poder encontrarle la vuelta a la marcación de los balones detenidos. Así como Racing le marcó los dos tantos en el Carminatti, el Canalla le abrió el marcador en la primera pelota parada que dispuso. Tanto Ojeda como Silva Torrejón perdieron sus marcas y Maximiliano González pudo desnivelar con tiempo y espacio.
3
sostiene el ritmo. Uno de los mayores déficits de Olimpo es la contención en el mediocampo. Con Porras fuera de estado físico, los volantes no consiguen presionar al adversario en tres cuartos. Y así como los volantes se retrasan para no dejar tantos espacios y no dejar tan expuesta a la retaguardia, Troyansky y Depetris quedan totalmente aislados.