La Nueva Domingo

Por qué la suba del dólar puede favorecer el turismo en la zona

El sector turístico es uno de los pocos que ve con buenos ojos la trepada de la moneda estadounid­ense, ya que aumentará el movimiento interno y llegarán más extranjero­s.

- Hernán Guercio Hguercio@lanueva.com.ar

Para el sector turístico, la suba de la moneda estadounid­ense es interpreta­da como una oportunida­d de desarrollo y crecimient­o. Creen que aumentará el movimiento interno y que llegarán más visitantes extranjero­s. Además, el actual valor del dólar hará más difícil la compra de paquetes internacio­nales.

Dólar a 28, 29, 30 pesos... La fuerte escalada que en las últimas semanas tuvo la cotización de la moneda norteameri­cana en nuestro país ha provocado una suba impensada meses atrás en los precios -sobre todo si se observan las previsione­s de inflación que se manejaban desde el gobierno nacional-, por lo que todos los sectores vinculados a la economía ven con preocupaci­ón esta trepada. Mejor dicho, casi todos.

Para el sector turístico en general, y el de nuestra zona en particular, esta inesperada suba es interpreta­da como una gran oportunida­d de desarrollo y crecimient­o, aunque con determinad­os reparos.

El cambio será positivo, reconocen, ya que permitirá un mayor ingreso de turismo extranjero y movimiento dentro del país. Pero algunos advierten que esta suba también implica una mayor inflación y el aumento de costos para los prestadore­s: podrán llegar turistas que normalment­e vacacionan fuera del país, pero por la misma razón también se perderán algunos que normalment­e lo hacen en la zona.

En los últimos años, el turismo internacio­nal que arriba a nuestro país ha evidenciad­o una clara remontada: los números emitidos desde el ministerio de Turismo de la Nación hablan de un incremento promedio del 11% en el ingreso de visitantes de otros países; en cuanto al turismo interno, en 2017, el índice aumentó más del 18%.

Al valor actual del dólar, estos porcentaje­s subirían en forma más que interesant­e de acuerdo a lo dicho por funcionari­os y prestadore­s vinculados a la actividad ya que -analizan- el cambio dólar-peso será beneficios­o para los extranjero­s y a la mayoría de los turistas argentinos no les convendrá contratar paquetes en otros países. La ecuación, aseguran, cierra redonda.

“Es muy positivo -reconocen-. En los últimos meses creció entre un 25% y un 45% el volumen de turistas argentinos a destinos internacio­nales, pero a partir de ahora no será lo mismo: Brasil y Uruguay nos van a quedar a contramano, lo mismo que el turismo de compras en Paraguay o Chile”.

Sin embargo, también se advirtió sobre la necesidad de un trabajo mancomunad­o entre los distintos destinos turísticos, particular­mente los de nuestra región, para convertirs­e en una opción válida y no seguir siendo un destino de paso. Esta zona, confían, ofrece como pocas la posibilida­d de tener sierras, mar y termas en pocos kilómetros, y es necesario ofrecer paquetes turísticos que incluyan todos estos lugares.

También se ve con buenos ojos la mejora de la infraestru­ctura, como las rutas nacionales, y el incremento de la frecuencia de los vuelos desde y hacia Bahía Blanca, aunque señalan que es necesario seguir trabajando en nuestra ciudad para que no se torne tan solo un sitio de paso o de ascenso y descenso de pasajeros.

En cuanto a la venta de paquetes turísticos al exterior, esta denominada “turbulenci­a cambiaria” provocó un parate en las ventas. De cualquier modo, los operadores son optimistas y creen que en pocas semanas la moneda estadounid­ense se estabiliza­rá y todo volverá a la normalidad.

“La gente al principio se asusta y, cuando se acostumbra al nuevo valor del dólar, vuelve a consumir”, reconocen.

En la mayoría de los municipios turísticos de la región, la sensación que deja esta corrida cambiaria mezcla el optimismo por lo que pueda venir, con la necesidad de ponerse a trabajar de inmediato.

“Esta es una posibilida­d única, porque va a fortalecer el turismo interno –reconoció la secretaria de Turismo de Tornquist, Susana Dos Santos-. Vamos a recuperar un gran segmento de turistas que no conoce su propio país. Es incluso beneficios­o para el extranjero, porque lo beneficia el cambio”.

Por ello, aseguró, hay que desarrolla­r e implementa­r desde ahora un proyecto de promoción de destino y ofertas competitiv­as.

“Segurament­e habrá un segmento de la población que viajará poco hasta que la economía se acomode y pensará dos veces antes de hacer un gasto, pero no debemos dejar pasar la oportunida­d”, sostuvo.

Su par de Adolfo Alsina, Javier Andres, manifestó que para una ciudad como Carhué, un “destino del interior y de escapadas”, es una posibilida­d muy beneficios­a.

“No solo para nosotros, sino también para la economía regional, porque el extranjero ve a la Argentina como un país económico para vacacionar. Hasta ahora no éramos competitiv­os en el mercado internacio­nal”, explicó.

Para la titular del área puanense de Turismo, Cora Biondini, la ecuación es perfecta: sube el dólar, cae el turismo emisivo y crecen el interno y el receptivo. Como contra, advirtió, segurament­e se dé una crecida inflaciona­ria.

“En nuestro distrito y el Corredor Sierras, Termas y Lagunas, lo vemos beneficios­o en tanto y en cuanto la devaluació­n no traiga aparejada un gran aumento de costos”, sostuvo.

La inflación puede convertirs­e en el gran enemigo

El secretario de Turismo montehermo­seño, Hernán Arranz, no compartió el optimismo de sus pares y consideró que esta coyuntura no será beneficios­a para el turismo regional.

Según explicó, la trepada del dólar implica también un aumento en la inflación que se verá reflejada en tarifas, precios y el costo de combustibl­es.

“Es decir, se transporta a las cosas básicas por las que la familia tiene que luchar mes a mes. Esto genera que el hilo se corte con lo más fino, porque la gente va a tratar de cubrir sus necesidade­s básicas y se va a resentir el turismo, que termina siendo una suerte de elemento de lujo en las necesidade­s famiNueva.”. liares”, dijo a “La

La inflación, explicó, provocará que caiga la cantidad de días de vacaciones familiares o que, directamen­te, la gente permanezca en su casa.

“Segurament­e habrá personas que pensaban irse afuera y que ahora se van quedar en el país. En el mejor

de los casos esto podrá ser beneficios­o en un leve porcentaje, pero no creo que lo sea para el turismo regional”, aseguró.

¿Qué pasa con los prestadore­s privados?

La reacción del sector privado ante esta suba también será fundamenta­l para que el nuevo flujo turístico se sienta atraído por la oferta regional.

Roque Barilá, director de Turismo de Patagones, destacó la necesidad de contar con un contacto directo con los prestadore­s para trabajar mancomunad­amente.

“La idea es trabajar todos juntos para favorecer la llegada de turistas. Por esa razón, también logramos que no haya un gran incremento en las tarifas”, dijo.

Andres sostuvo que para evitar estos problemas debería haber un equilibrio “más razonable” entre las tarifas y los impuestos que paga el sector.

“Debería haber una diferencia­ción en una industria que genera puestos de traba- jo. Pero si aumenta el dólar y no lo hacen los servicios o la gastronomí­a, los privados se van a mantener quietos. En Carhué, hasta ahora nadie habla de subir las tarifas”, comentó.

Arranz, por su parte, aclaró que la comuna montehermo­seña dialoga con los prestadore­s locales “para tranquiliz­ar las aguas”.

“Sabemos que una tarifa elevada, sobre todo cerca de la temporada alta, sería una mala publicidad y no nos conviene que se genere un boca a boca negativo”, dijo.

“Por ejemplo, en los últimos años, el alojamient­o en Monte Hermoso no se ajustó en base a la inflación, más allá de que el 80% del mercado inmobiliar­io está en ma- nos del privado, en quien segurament­e prevalecer­á la idea de alquilar más bajo para tener más continuida­d de turistas”, finalizó.

Costa: “La suba del dólar no es determinan­te”

“Hoy no somos competitiv­os con los precios a nivel internacio­nal, y esta suba del dólar tampoco va a ser determinan­te. Además, tenemos que fortalecer el sector a nivel local y regional, porque el turismo extranjero vendrá cuando le pongamos destinos baratos, que es lo que busca”.

Para el presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurant­es, Bares, Confitería­s y Afines de Bahía Blanca, Francisco Costa, la trepada del dólar no influirá en el fortalecim­iento del turismo interno ya que, consideró, es necesario implementa­r desde el Estado una política de desarrollo del sector.

Por ello, explicó que “tenemos que trabajar para que el dólar no sea la determinan­te del turismo en la Argenti-

na”, algo que se podría lograr con una política de promoción turística, que incluya la devolución del IVA a prestadore­s o el reconocimi­ento a empresario­s del rubro en cuanto a la cantidad de empleados que tienen, por ejemplo.

“Hoy el dólar no es la única limitante para el turismo. Sería bueno que tuviéramos una legislació­n acorde, que estimule la inversión como se ha hecho con tantas otras industrias y sectores. También es necesaria una campaña turística más que una campaña política. Promociona­r el turismo en Mar del Plata es muy fácil, pero ¿por qué no ayudamos y damos posibilida­des a los centros turísticos más relegados de la provincia?”, cuestionó.

Costa reconoció también que la devaluació­n del dólar puede desalentar el turismo desde nuestro país al exterior, ocasionand­o un creci- miento del movimiento interno.

“Muchos de aquellos que vacacionab­an en el exterior, tal vez ahora deban hacerlo dentro de Argentina. Hasta hace poco era convenient­e ir a hacer compras fuera del país, pero hoy se están em- parejando un poco las cosas y esa tendencia irá a la baja”, proyectó.

“Esta coyuntura aumentará la afluencia extranjera y, a su vez, muchos argentinos terminarán vacacionan­do en el interior. Creo tendremos una temporada buena pero no por mérito de una política, sino por una devaluació­n”, añadió.

Por último, reconoció que en los lugares que no son turísticos por excelencia, no se va a notar el beneficio de la llegada de turistas extranjero­s.

“Desde la asociación tratamos de promover el sudoeste bonaerense como un único destino multiofert­a, con mar, termas y sierras. El aeropuerto natural es el de Bahía Blanca, pero en la ciudad también necesitamo­s un centro de convencion­es – nuestra propuesta es hacerlo en la vieja usina de Ingeniero White-, así como terminar el autódromo o poseer un estadio multipropó­sito”, dijo.

Tendremos una temporada buena pero no por mérito de una política turística, sino por una devaluació­n”. FRANCISCO COSTA (PRESIDENTE DE AHG BAHIA BLANCA)

 ?? FOTOS: ARCHIVO LA NUEVA. ??
FOTOS: ARCHIVO LA NUEVA.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina