Sporting quedó más cerca de la ventaja deportiva
El elenco rojinegro empató ante San Francisco como visitante 0 a 0 y no pudo asegurarse la ventaja deportiva.
Sporting no fue el de siempre. Le costó poner contra las cuerdas a un San Francisco que hizo un muy digno partido y se tuvo que conformar con un empate en cero con sabor a poco.
El rojinegro –uno de los dos elencos más goleadores del certamen junto a Tiro Federal con 25 tantos-- no pudo acorralar a un adversario que le jugó de igual a igual durante 85 minutos.
Recién en los 5 minutos fi- nales, la escuadra de Emiliano Ortiz lo pudo meter adentro con más empuje que juego y fue donde apareció la figura del arquero Manuel Carnicero, quien ya había tenido algunas buenas intervenciones.
Sacando el contexto de 23 unidades de distancia entre uno y otro, el trámite --en general-- fue bastante parejo.
Los primeros 15 minutos fueron de la visita (hubo un remate de Cuitiño que se fue muy cerca del palo izquierdo), pero el local lo emparejó y el pibe Sandoval mostró el camino. Dos remates de media distancia del 10 encontraron muy buenas respues- tas de Nacho Torres.
Recién en el tramo final de la primera etapa, la escuadra rojinegra encontró algún resquicio para generar alguna chance y Rosas tuvo el desnivel con un derechazo que sacó Carnicero.
El arranque del complemento tuvo el mismo tono que el cierre del primero. Sporting parecía inclinar la cancha y encontrar grietas del rival, pero se quedó en el amague.
Más allá de que Carnicero evitó el gol de Sabatini, tras una muy buena pelota profunda de Pacheco, el trámite volvió a tornarse equilibrado.
De hecho, Torres le sacó un tiro libre a “Popi” que llevaba destino de red en el segundo palo.
Luego, el partido decayó. A la visita le faltó precisión en la mitad de la cancha y el anfitrión comenzó a sentir el esfuerzo del partido.
El reloj comenzó a jugarle encontra al puntaltense, que equivocó los caminos para llegar con peligro.
Sin embargo, en el tramo final, con más enjundia que juego, el equipo rojinegro lo buscó por todos lados.
Entre Matías Cardozo y Carnicero –por dos veces-evitaron el gol de Burgos y de un Sporting que lo buscó hasta al final.
Pero esa decisión de imponer su ley llegó demasiado tarde y lo terminó pagando con un empate con sabor a poco.