Si hacés tres goles y no te alcanza...
Con la dolorosa eliminación ante Francia en octavos de final de Rusia 2018, muchas serán las razones a analizar del por qué Argentina se vuelve tan pronto a casa.
Las expectativas previas y la ilusión de ver a Messi levantando la Copa se fueron diluyendo desde el inicio mismo del Mundial, más allá de la angustiante y celebrada clasificación ante Nigeria, y del orgullo expuesto por los jugadores que muchas veces nos hizo zafar de situaciones límites.
Pero Argentina padece desde hace un tiempo, y lo sufrió aún más en Rusia, de un trabajo organizado desde todas las esferas, incluyendo decisiones dirigenciales.
Samapoli -con apenas 15 partidos sobre el lomo incluyendo los 4 del Mundiales el tercer técnico de un ciclo que se empezó a armar tras la renuncia de Sabella en 2014, donde también pasaron el “Tata” Martino y el “Patón” Bauza.
En la vereda opuesta, Didier Deschmaps cumplía 80 cotejos como DT y un proceso respaldado que incluyó renovación y recambio.
En este simple contexto ya nos sacaron ventaja. Porque todo trabajo lleva su tiempo y elaboración.
Si lo trasladamos al campo de juego, ayer también se notó una marcada y decisiva ventaja en favor de los franceses.
Los equipos se arman de atrás para adelante. Una buena defensa compensa cualquier desajuste. Y en esa faceta también fallamos.
Argentina, pese al errado planteo de Samapoli de no jugar ayer con un “9” de área, tuvo aciertos ofensivos para marcar 3 goles -con algo de fortuna en el de Gabriel Mercado-, pero no dejó de padecer con la lentitud y falta de coordinación de volantes y defensores en el retroceso.
Griezmann, Pogbá y Mbappé, quien mostró aptitudes para ser estrella, respaldados por una gran tarea de los laterales y los volantes centrales Matuidi y Kanté, nos superó en velocidad y nos castigó cuando quedó de frente ante el varias veces desprotegido Armani.
Francia mostró conceptos, ideas y convicción de juego. Argentina, pese a su siempre valorada entrega, no supo a qué jugaba.
Se terminó un ciclo y habrá recambio, pero debemos entender que el fútbol es un deporte grupal y no la dependencia de un jugador, aunque se trate del mejor.