La sucursal perfecta
Inaugurada en 1921, la sucursal del Banco de la Nación Argentina en nuestra ciudad en uno de los edificios emblemáticos del centro. Incluso, fue considerado como la sucursal "más perfecta que existe en el país".
La edificación fue diseñada por el ingeniero Juan Ochoa y construida por Baldassarre Zani, según consta en los archivos de La Nueva.,
siguiendo los lineamientos de la arquitectura bancaria del siglo XIX: “un edificio cerrado, para ocultar el manejo de las riquezas y defenderlas; un bancocofre, donde los dineros de la gente estarían seguros”.
Su construcción fue por demás curiosa, ya que la entidad ya había levantado, en 1904, su sede propia en la esquina de Estomba y avenida Colón (actual edificio de la Aduana Nacional), pero fue tal el movimiento que tuvo la ciudad en materia económica y financiera que en pocos años ese edificio resultó insuficiente y se decidió construir una nueva sede.
El inmueble que ocupa el Banco Nación es un modelo por excelencia de la arquitectura bancaria del siglo XIX, un edificio robusto, cerrado, diseñado con estilos neoclásico, para darle prestigio y monumentalidad.
Son inmuebles pensados como verdaderos "bancoscofres", donde uno podía dejar con tranquilidad sus ahorros y que a partir de su monumentalidad dejaban en claro el poder del dinero. Esa presencia se trasmite en su puerta de hierro de acceso que ocupa toda la altura del edificio, flanqueada por dos monumentales columnas.
El edificio de Bahía Blanca es considerado el más importante –por su superficie-- de todos los que la entidad bancaria construyó en el interior. Tiene estructura metálica, muros de mampostería y todo un juego de cúpulas y estatuas coronando su remate.
En mayo de 1994, el edificio fue declarado Patrimonio Arquitectónico y Urbano del Partido de Bahía Blanca.