Al mando de un puerto que no para de crecer y desarrollarse
El doctor Miguel Donadío, presidente del Consorcio de Gestión, analizó el pasado, desarrolla el presente y presagia un futuro muy auspicioso.
Pablo Andrés Alvarez palvarez@lanueva.com
El éxito de un modelo que despertó dudas en sus inicios, pero que las fue despejando con el correr del tiempo hasta llegar a este presente de esplendor.
De ese modo, el doctor Miguel Donadío resumió los 25 años del Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca, el cual preside desde noviembre de 2017.
“En sus comienzos mucha gente era escéptica de que pudiera funcionar de esa manera. Incluso, se pensaba que el Consorcio cumpliría las funciones de oficina burocrática y sin embargo se demostró que nada fue así y que la conformación de un directorio fue clave para el enorme desarrollo posterior. Eso marca el éxito del modelo”, manifestó Donadío.
Desde 1991, cuando se empezó a trabajar en este tema, a la fecha muchas cosas han pasado por este lugar emblemático de Ingeniero White. Y la gran mayoría fueron aspectos de crecimiento.
“En honor a la historia, confieso que a las primeras reuniones se invitó a muchas instituciones de la ciudad que no quisieron participar. No le veían futuro a la cuestión y vaticinaban una vida corta a la idea. Pero nació la Ley de Puertos y eso permitió transferir el puerto a la órbita provincial, con la obligación de crear un ente público no estatal y un consorcio con la participación de los actores locales. O sea, la comunidad portuaria asociada a la gestión del puerto. La articulación público-privada generó un modelo de gestión que terminó siendo muy exitoso”, rememoró el presidente del CGPBB.
--Las PPP como están en boga ahora, surgieron en la década del '90 con este modelo.
--Es así. Lo que hoy aparece en la cartelera de la gestión pública, el puerto ya la implementó en 1993. Lo que parecía que iba a ser una oficina administrativa estatal más se constituyó en el engranaje perfecto para darle al puerto un crecimiento exponencial.
“Por ejemplo, la fragilidad con la que arrancó el Consorcio, lo pinta una anécdota: cuando surgió, no había dinero para pagar los sueldos. Ni siquiera había caja para mandar a imprimir la documentación necesaria para co- menzar a funcionar. 25 años después, las obras que se hicieron hablan solas del éxito del modelo. Se empezó de cero para construir una estructura que en la actualidad está absolutamente consolidada”.
Donadío remarcó la labor de José Egidio Conte, el primer presidente que tuvo el Consorcio de Gestión.
“Los primeros pasos de Conte, junto a ese primer directorio histórico, fueron muy valiosos. Porque no se claudicó ante la adversidad y se empezó a proyectar un