"La Cámara es parte de la historia del Consorcio del Puerto"
"Este sistema de gestión nos parece muy positivo", dijo el ingeniero Miguel Lauría, gerente operativo de la Cámara de Permisionarios y Concesionarios de los Puertos de Bahía Blanca.
“Desde la Cámara de Permisionarios y Concesionarios de los Puertos de Bahía Blanca hacemos llegar nuestras felicitaciones al Consorcio de Gestión del Puerto por el 25 aniversario de su fundación. La Cámara es parte de la historia del CGPBB desde los inicios y nos une un recorrido importante. Este sistema de gestión nos parece muy positivo; un diferencial que siempre sumí y sigue sumando a la gestión portuaria".
Así lo expresó el ingeniero Miguel Lauría, quien ocupa el cargo de gerente operativo dentro de la comisión directiva que ahora preside Blas Di Costanzo.
La Cámara de Permisionarios y Concesionarios de los Puertos de Bahía Blanca inició sus actividades el 29 de noviembre de 1991. Está constituida por 17 empresas ubicadas en el área portuaria de Bahía Blanca donde operan instalaciones relacionadas con el sector de energía, petroquímica, cerealero y servicios portuarios.
"Este tipo de entidad, como es el Consorcio, asegura un tipo de diálogo pemanente y fluido. Podemos acordar políticas y programa que son de mucho beneficio manteniendo una relación directa", señaló Lauría.
--¿Cuál es la importancia que tiene la Cámara en el quehacer del puerto?
--El dato más relevante, según nuestros estudios, es que más del 90 por ciento de los ingresos del Consorcio están relacionados con el pago de tasas directas e indirectas que efectúan los socios de esta Cámara. Así, la posibilidad de crecimiento y desarrollo que tiene el Consorcio está también sustentado en los socios de nuestra entidad.
--¿Cómo observa la implementación de nuevas fuentes de energía para potenciar a las empresas?
--Veo un futuro muy promisorio en todo lo relacionado con los nuevos recursos energéticos. También con el gas y los que se está produciendo en Vaca Muerta. Abre la posibilidad de amplaición de las planta del sector petroquímico, lo que indirectamente impacta en la geneación de trabajos en el sector de servicios portuarios y en la parte de mantenimiento y construcción.
"También el emprendimiento del tren norpatagónico, que hace poquito se lanzó en el instalaciones de Consorcio, va a permitir la salida de productos frutícolas del alto valle e incrementará mucho la actividad en el puerto".
--¿Cuáles son los recientes proyectos que apuntan a mejorar la logística de las empresas y del puerto? --
Nuestras expectativas tienen que ver primero que nada cn el desarrollo de la infraestructura del puerto, de manera que se pueda dotar al mismo de las capacidades necesarias para ser eficientes en el manejo de la cargas.
"Esto significa, fundamentalemente, resolver el tema de los accesos carreteros y el traslado de la producción mediante trenes. Resolver un tema que se ha tornado bastante crítico", apuntó el ingeniero Lauría.
“También se apunta a tener un puerto que además de ser rentable se torne competitivo y de esa manera atraer inversiones. Hacer que las grandes empresas quieran hacer pie en nuestro país. Y para eso es muy importante llevar adelante un proceso revisión de las tasas". --¿Con eso alcanzaría ?
--No. Otro tema clave es el de la reparación de tierras, pensando en otorgar mayores posibilidades para la instalación de futuras plantas que aporten al desarrollo. Por suerte se dispone de espacio suficiente. Los socios
Para el ingeniero Miguel Lauría, la Cámara de Permisionarios y Concesionario del Puerto de Bahía Blanca, tiene, entre otros objetivos, el de velar por los intereses de los socios.
"A través de nuestro representante en el directorio del Consorcio hay una participación muy importante en todo lo que respecta a decisiones relacionadas con la administración del puerto y del futuro desarrollo", señaló Lauría.
La Cámara está conformada por un grupo de empresas que pueden agruparse en tres rubros básicos: petroquímico/energía, cerealeros y empresas de servicio.
Las primeras tienen importantes actividades productivas para la elaboración de derivados del petróleo y gas, incluyendo naftas polímeros y fertilizantes; las segundas se orientan a la producción entre otros de aceites comestibles, malta para cerveza, alimentos paletizados para ganado, etc., y a la exportación de granos.
Y las últimas poseen facilidades destinadas a la prestación de servicios indispensables para la exportación de producción de la región y para el funcionamiento del puerto.