Nadie arroja piedras al árbol que da frutos
ANIVERSARIO. El 2 de julio de 1974 muere en Buenos Aires el general Juan Domingo Perón, quien supo levantar “la bandera soberana” caída en 1930. Fue la misma bandera que supo levantar Yrigoyen en 1916, caída en Caseros en 1852.
Cuando ocurrió, desde todo el mundo llegaron rápidamete los ecos de las reacciones que había provocado la muerte del general en los principales órganos de opinión.
“Uno de los hombres políticos más sorprendentes del siglo XX”, es la calificación de la cadena de televisión NBC de los Estados Unidos. La cadena CBS, del mismo país señala, por su parte, que “Perón era un líder carismático muy amado por millones de argentinos y, al mismo tiempo, muy combatido por muchos en los años cincuenta. En los años 70, muchos de quienes habían sido sus enemigos habían dejado de serlo”.
Un antiguo adagio peruano afirma que “nadie arroja piedras al árbol que da frutos”.
Vicente J. Paladino