Un asalariado trabajará hasta 225 días para pagar impuestos
Un estudio concluye que los trabajadores del sector formal con diferentes escalas de ingresos quedarían totalmente liberados de sus obligaciones fiscales el 12 de agosto como máximo.
UNA CARGA PESADA Un asalariado formal de nuestro país tendría que trabajar este año entre 173 y 225 días para cumplir con sus obligaciones impositivas de todos los niveles de gobierno (municipal, provincial y nacional) de acuerdo con un informe privado.
En consecuencia, el “Día de la independencia tributaria” se ubica en Argentina entre el 21 de junio y el 12 de agosto, en función de cuáles sean sus ingresos, fechas en las cuales el asalariado en cuestión dejaría de trabajar para el fisco, y podría disponer libremente de los ingresos generados por su ocupación.
"Si se compara la situación actual con la del año 2011, el Día de la Independencia tributaria en ese periodo era entre el 18 de junio y el 4 de julio, con lo cual en cuatro años se incrementó entre 3 y 39 días la presión tributaria, siendo mayor el aumento para las familias de mayores ingresos en los casos considerados", explicaron desde el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), el organismo que elaboró el estudio.
Aclaró el Iaraf que se consideran los porcentajes de carga tributaria formal que deben soportar los trabajadores, es decir, lo que legalmente están obligados a tributar.
Al momento de desagragar cuales fueron los impuestos que originaron este aumento en la carga impositiva, sobresalen, en primer término, los impuestos al trabajo (aportes y contribuciones a la seguridad social) que se llevan unos 71.554 pesos por año de los trabajadores de menores ingresos, monto que equivale a 119 días de trabajo.
El mismo impuesto, pero para los tramos de ingresos más elevados, se lleva, en forma anual, unos $ 275.288, que equivalen a 100 días de trabajo para cumplir con esta obligación fiscal.
Las causas
De acuerdo con el Iaraf, la falta de actualización de mínimos y deducciones del impuesto a las Ganancias para el año 2012 y el año 2014 y la falta de ajuste de los topes de los tramos de la escala de cálculo desde el año 2001, han provocado que quienes deban tributar el impuesto a las Ganancias lo hagan a tasas efectivas mayores cada año, es decir que
En franco ascenso.
El aumento entre 2011 y 2015 fue producto de la falta de actualización en Ganancias y Bienes Personales.