Salir a la ruta sin improvisar
La Nueva. repasó con algunos especialistas locales aspectos básicos del mantenimiento de un vehículo ante el inminente inicio de las vacaciones.
Cuidados. Especialistas locales dieron detalles sobre el mantenimiento del vehículo ante el inicio de las vacaciones.
Cargar las valijas en el auto, salir a la ruta y empezar a disfrutar del descanso es lo más ansiado, pero, ¿qué precauciones hay que tomar antes de girar la llave de encendido?
Aunque seamos de aquellos que al menor ruido nos animamos a levantar el capot o tirarnos abajo, es fundamental pasar revista a los temas básicos y, ante la duda, hacerle una visita al mecánico.
Lo primero es saber si tenemos la documentación en orden.
El carnet de conductor tiene 5 años de vencimiento y la multa en ruta por tenerlo vencido admite dos posibilidades: que el vencimiento no haya superado los 6 meses y la sanción será de $ 899,50, menos 50% por pago voluntario, o que se hayan superado los 6 meses, y en ese caso el monto asciende a $5.928, o $2.964 por pago voluntario. Carecer de licencia es motivo de retención del vehículo en un control vial.
La VTV tiene un año de vigencia, es un requisito provincial, y la multa por vencimiento o ausencia es de $5.928, menos el 50% de quita por pago voluntario. En la Provincia de Buenos Aires la Policía Vial está facultada para retener la licencia de conducir por falta de VTV y entregar una constancia para circular. La licencia es recuperada cuando el infractor paga la multa en el Juzgado Provincial.
Circular sin luces bajas – no con luces de posición, que es motivo de sanción-- está penado por la ley nacional 24.449, y la provincial 13.927, decreto 532/09. La multa asciende a $5.928, con la reducción del 50% por pago voluntario.
La sanción por falta o vencimiento de la recarga del matafuegos cuesta $988, o $494 si se opta por el pago voluntario.
Finalmente, se debe tener presente que no es exigible por ninguna autoridad en ruta el talón de pago mensual del seguro, y una sanción por este motivo será anulada en el Juzgado. Si el infractor no porta el comprobante del seguro (póliza o carnet) la multa es de $988, pero si carece de cobertura el valor se eleva a $5.928, menos el 50% por pago voluntario. También es motivo de retención de licencia.
Antes de salir, es inevita- ble ocuparse del estado de los neumáticos.
“Son la primer causa mecánica de accidentes en ruta”, aseguró Eduardo Bertotti, presidente del Instituto de Seguridad Vial (ISEV).
La presión de inflado es el factor más importante. No es un valor intuitivo ni aproximado, es diferente para cada vehículo y debe atenderse la indicación del fabricante. Una presión insuficiente deriva en un desgaste prematuro de los neumáticos, con consecuencias sobre la estabilidad en ruta o riesgo de desprendimiento de la banda de rodamiento.
Lo ideal es que la profundidad del dibujo de los neumáticos (testigo de desgaste) ronde los 2,5 milímetros. La falta de dibujo (goma lisa) puede ser motivo, en días de lluvia, de un fenómeno conocido como hidroplaneo, deriva del auto sin control por la pérdida de adherencia de los neumáticos, al no poder desalojar la película de agua en contacto con la cinta asfáltica.
A la primera señal de hidroplaneo –desaparición del sonido que produce el agua, o deriva-- hay que bajar lentamente la velocidad, evitar maniobras bruscas y nunca pisar el freno.
Paralelamente, para evitar problemas de vibración, inestabilidad o tendencia a la deriva del vehículo, se deben alinear y balancear los neumáticos cada 10 mil kilómetros o si se observan deficiencias. También es necesario hacerlo cuando se coloquen cubiertas nuevas o reparadas.
A su vez, si hay que reemplazar algún neumático, es aconsejable hacerlo de a pares y manteniendo dibujo y características, para no alterar la estabilidad del vehículo en las curvas y evitar que transmita rigidez a la dirección.
Hay otros mantenimientos básicos que no cuestan demasiado dinero. La limpieza es uno. Los limpiaparabrisas deben estar limpios y en condiciones, y los sapitos destapados. La visibilidad es vital en la ruta.
Voces con experiencia
Para refrescar algunos aspectos a tener en cuenta antes de subir a la ruta consultamos a dos “históricos” de la actividad : Raúl Cerioni, mecánico especializado, y Franco Bruno, especialista en tren delantero, frenos , amortiguación y dirección, con 46 años de trayectoria.
Bruno destacó como aspectos fundamentales a te-
El desgaste prematuro de componentes del tren delantero es la señal de que se circula muy rápido, y del pésimo estado de conservación de calles y rutas.
ner en cuenta el estado de los neumáticos, amortiguación, eficiencia de frenado, alineación y balanceo. Señaló que una conducción veloz y el mal estado de calles y rutas es el principal motivo de las visitas al taller.
“Si hablamos de amortiguación, hay que tener en cuenta que superados los 30.000 kilómetros hay que empezar a prestarle atención al tema, aunque la vida útil promedio puede alcanzar los 100 mil kilómetros”, destacó.
Un amortiguador en mal estado puede ser motivo de un accidente de proporciones durante una maniobra brusca a alta velocidad.
“Rotar las cubiertas cada 8 o 10.000 kilómetros puede representar una ganancia en durabilidad de hasta 30 mil kilómetros”, señaló Bruno.
Advirtió además, que la participación de la electrónica en el herramental disponible en el mercado no alcanza a reemplazar en todos los casos a la experiencia técnica en alineación.
El envejecimiento natural del líquido de frenos, seguramente es otro aspecto al que se le presta poca atención. En vehículos nuevos habría que reemplazarlo cada dos años. Una señal de que ha llegado el momento de hacerlo es su color pardo oscuro, y una condición, si va a completar el depósito, mantener siempre la compatibilidad aconsejada por el fabricante.
Por su parte, Raúl Cerioni, con 38 años de trayectoria en mecánica general, a quien asisten su hijo, Gustavo, de 21 años, y Julio, de vasta experiencia, llamó la atención sobre la necesidad de revisar aspectos básicos como el cambio de aceite y filtros, correas y bujías de encendido.
“La vida media útil de las correas de distribución es de 60.000 kilómetros, o hay que comenzar a poner atención sobre su estado superados los 3 años de antigüedad (endurecimiento, resquebrajaduras). Eso tiene que ver con un envejecimiento del material”, explicó Cerioni, y agregó que es uno de los casos más frecuentes.
Sobre posibles fallas de encendido indicó que superados los 40.000 kilómetros hay que empezar a poner atención en las bujías.
Por su parte, Savino Perticaroli, especialista en encendido y electricidad, citó como motivos de las visitas más frecuentes al taller la falta de mantenimiento de alternadores, correas, y béndix.
El cableado eléctrico tiene que estar en buenas condiciones. Un cortocircuito puede desconectar mecanismos muy importantes, como el airbag.
Por su parte, en invierno, la batería siempre es un punto débil: si tiene más de dos años puede fallar y jugarnos una mala pasada. Por eso se recomienda una revisión previa y aprovechar para testear el funcionamiento del alternador y el estado de las correas.
Controles de seguridad
Los sistemas pirotécnicos (disparo) de los airbags tienen un tiempo limitado de vida útil. Su sustitución debe hacerse pasados los 10 años, y en todos los casos en los que hayan funcionado, con la intervención de un concesionario oficial.
Si el vehículo sufrió un accidente es aconsejable hacer revisar el sistema.
Es fundamental promover la conciencia y responsabilidad de las familias en la utilización de sillas de seguridad para niños. Antes de hacer un viaje largo, se deben leer bien las instrucciones de uso para una correcta orientación según la edad del niño.
Durante el primer año de vida deben colocarse mirando hacia atrás, y de 1 a 8 años de edad, hacia adelante. Esto se relaciona con el peso del niño: cuando llega a pesar 10 kg debe cambiarse de la silla, cuna o huevito a la silla N°1, al llegar a los 18 kg a la silla N°2, y a los 22 kg a la N° 3.
Los niños nunca deben viajar en la falda de una persona adulta. Si se produce un choque o una frenada brusca a 60 km/h, el peso de la madre aumenta 20 veces, por lo que se haría imposible retener al niño. Se debe utilizar siempre el cinturón de seguridad y exigir que todos los ocupantes del vehículo lo hagan.