Bahía Basket se va a Puerto Rico con una derrota en casa: 88 a 74
La autocrítica -colectiva- de Máximo Fjellerup tras la derrota de Bahía Basket ante Instituto (Córdoba) por 88 a 74. Mañana, el viaje a Puerto Rico.
Ricardo Sbrana a tercera derrota como local en lo que va de la temporada sufrió anoche Bahía Basket. El dato no es menor porque en el casillero “ganados” acumula 13 éxitos. Es decir, su casa es una fortaleza. Pero, ¿qué hizo (bien) Instituto de Córdoba como para subirse al podio de vencedores en el Osvaldo Casanova y superar al local 88 a 74? Sacó de su eje al equipo de Sebastián Ginóbili.
Lo complicó desde el arranque mismo. A los 4m30 ganaba 8-0 ante un Bahía que desperdiciaba posesiones (8 en los primeros 10m.) o erraba increíblemente (totalizó 3-14 en tiros de cancha). Instituto tampoco tuvo un manejo eficiente de la pelota (6 pérdidas), pero sí algo más de efectividad, con Green (6) y Whelan (4).
Bahía conectó con el juego a partir del 2C. El ingreso de Fjellerup le abrió una opción de gol, sobre todo porque el tresarroyense atacó profundo, sacó faltas y sumó libres (4-6). También se encendió Redivo y aportó 9 puntos para reducir a un doble a 3m42s. El esmero defensivo de Ramos abajo y de Vaulet sobre Green en el perímetro, también ayudaron.
Por ello la visita se apoyó en Bertone, quien desde el banco aportó la cuota de gol necesaria para sostener la ventaja parcial y cerrar arriba en el descanso 39-34.
El conjunto local dio otro paso hacia la consolidación
Len el 3C. Momentos de defensa zonal invitaron al rival a probar más seguido desde la medialuna, aunque con baja eficacia (3-7). En ataque Lucio fue el guía inspirado (8 puntos), aunque muy marcado como para generar mayor daño con sus bombazos.
Y llegó el último cuarto, cuando Instituto aseguró el resultado en forma definitiva con la aparición -en todo su esplendor- de Green, el segundo máximo goleador que tiene la Liga Nacional. Aportó 11 puntos que, sumados a los 10 de Bertone (2-2 en triples), frustraron mucho más al elenco bahiense, que se vio abajo por 20.
"El problema fue nuestro. Nos plantearon una idea de juego no agresiva, pero sí nos leyeron los sistemas, nos defendieron bien e hicimos todo mal. Fue uno de esos partidos en los que no te salen las cosas. No entraron algunos tiros... Un partido de esos medio enredado que hay que enfrentar y tratar de sacar adelante", analizó Máximo Fjellerup.
Bahía no pudo regalarse un triunfo previo al viaje. Que será largo y permitirá cambiar la cara.