Olimpo-Santamarina: poca gente y mucho malestar
El aurinegro cayó 2-1 ante el elenco tandilense, se retiró del campo bajo silbidos e insultos y el DT Mario Sciacqua dijo con crudeza: "Estoy preocupado".
Cuando finalizó el partido amistoso entre Olimpo y Santamarina, que ganó el conjunto tandilense 2-1, no sólo los jugadores aurinegros y los dirigentes recibieron los insultos y los reproches de los pocos hinchas (no más de 500 contando a los que estaban en las tribunas de Angel Brunel y O'Higgins, y también en plateas).
A la salida del Carminatti, un puñado de seguidores aurinegros, en el portón por donde se ingresa a zona de plateas, atacaron con palabras a los periodistas, con frases como "ustedes son cómplices de este desastre que está haciendo Dagna (Alfredo, actual presidente) con el club. Nos está llevando a la ruina y ustedes lo apañan", dispararon sin dar nombres ni referencias de los medios que habitualmente cubren a Olimpo en el mundo de Primera división.
Otros, más recatados y más fríos, fueron más allá: "ya está, no hay plata, no hay juego, pero sí hay descenso. El primer equipo que se va a la B Nacional es Olimpo", se escuchó casi en la esquina de avenida Colón y Angel Brunel.
En las redes sociales, los simpatizantes olimpienses explotaron con declaraciones como "sin jerarquía no se puede jugar en Primera, y eso es lo que le falta a Olimpo".
Otra: "Más de lo mismo, un equipo sin ideas y con horrores defensivos. Nos vamos derechito a la B".
¿Qué dijo el entrenador Mario Sciacqua?
"No jugamos bien y me quedé con un sabor muy amargo. En el segundo tiempo cambiamos la imagen, le pusimos más ganas, pero en el primero, el rendimiento colectivo fue muy bajo. En este tipo de instancias, más allá de que haya sido un amistoso, lo que venimos pregonando en cuanto a la intensidad, la presión y la actitud, no lo podemos tirar a la basura. Antes de este partido estábamos muy bien, habíamos cumplido prácticas excelentes, pero el viernes no lo demostramos en el campo de juego", sostuvo el DT.
"En el primer tiempo tuvimos 5 minutos de intensidad y de ideas, pero después nos desentendimos del juego completamente", cerró el entrenador Mario Sciacqua.