El deceso se produjo por un “traumatismo craneal penetrante”
La autopsia determinó que la víctima sufrió muerte violenta producto de nueve lesiones en el cráneo, la mayoría de ellas producida con un elemento punzante, y que su deceso fue consecuencia de “un traumatismo craneal penetrante”.
Dos jóvenes encontraron los restos humanos el miércoles 22 de febrero, en el sector del kilómetro 680 de la ruta nacional 3 norte, frente a la planta de la empresa ABSA, en inmediaciones del paraje El Triángulo.
El cuerpo estaba entre los pastizales, en cercanías de dos torres de alta tensión, junto a desperdicios y basura acumulada.
A pesar de que en primera instancia la policía informó que no se evidenciaban signos de violencia en el cadá- ver, la necropsia practicada por los médicos forenses estableció lo contrario.
El informe autopsial indica además que el individuo tiene seis heridas en el parietal derecho, una en la región parietotemporal del mismo sector (detrás de la oreja), otra en la región parietal izquierda, y la restante en una sutura intraparietal.
Ocho heridas fueron provo- cadas por un “elemento punzante/punzocortante” y la restante se causó con un objeto “contuso, con extremos angulados semicircular”, similar al mango de un arma blanca.
El cuerpo fue hallado sin manos, pero se destacó que no fueron constatados "cortes netos", pudiendo haber sido desprendidas por animales del lugar.