“Hubiera preferido perder por 25”, dijo Manu
San Antonio estuvo 25 puntos arriba en dos oportunidades. Perdió por lesión a Kawhi Leonard y cayó ante Golden State: 113-111. Final del Oeste, 1-0.
Las estadísticas frías de la NBA indican que el técnico Gregg Popovich perdió por primera vez después de 317 oportunidades que su equipo estuvo ganando por 25. Sí, los Spurs estuvieron 44-19 y 46-21 arriba ante Golden State y cayeron 113 a 111, en el inicio de la serie final -al mejor de siete- de la Conferencia Oeste.
“Fue un gran esfuerzo, pero es una derrota dura, porque era una gran oportunidad y la dejamos pasar”, admitió el DT.
Los números también reflejan que San Antonio sintió la baja por lesión de Kawhi Leonard, restando 7m55 del tercer cuarto, cuando, después de un lanzamiento de tres puntos cayó y se torció el tobillo izquierdo cuando lo pisó Zaza Pachulia, lo cual generó algunas suspicacias. “Es estúpido pensar que lo lesioné intencionalmente”, aclaró el jugador de los Warriors. A partir de ahí, los locales metieron un parcial de 18-0.
En medio de otro escenario complicado para los Spurs (que no cuentan con su base Tony Parker, lesionado), nuevamente Manu Ginóbili disimuló sus 39 años y se cargó el equipo al hombro.
“Hubiera preferido perder por 25. Es difícil tener una mejor oportunidad que la de hoy (por ayer) y se nos escapó”, reconoció Manu.
Las secuelas se evaluarán en el próximo juego, que será mañana, nuevamente en el Oracle Arena, desde las 22.
“La clave es ver cómo está Kawhi. Si no juega, se nos complicará mucho”, se sinceró el bahiense.
Ginóbili completó 26 minutos, con 7-10 tiros de campo (1-3 en triples) y 2-3 desde la línea de personal, más un rebote, una asistencia, un recupero y dos pérdidas.
“Estoy cansado. Hice un esfuerzo mayor al de otros días. Cuando tengo que jugar más por distintas razones me cuesta recuperar. Estoy cansado", avisó.
LaMarcus Aldridge con 28 puntos (11-24, 1-2, 5-6), ocho rebotes, tres asistencias, tres recuperos y seis pérdidas, fue el líder del ataque de los Spurs.
Mientras que el abanico de posibilidades de los Warriors se abrió con Stephen Curry, que se despachó con 40 puntos, incluidos siete triples y Kevin Durant, autor de 34 unidades.
Si bien los Warriors volvieron a sufrir la ausencia de su entrenador jefe Steve Kerr (problemas en la espalda), su presencia en la práctica previa al juego y en el entretiempo los inspiró, según manifestó Curry.
En la otra costa
Mientras tanto, hoy definirán Boston Celtics-Washingto Wizards, a las 21, quién pasa a la final del Este con Cleveland, que barrió 4-0 a Toronto.