La Nueva

PAMI: sobrecarga en hospitales

Tanto las unidades sanitarias como los sanatorios públicos registran una demanda superior a la normal debido a los más de 6.000 jubilados que carecen de profesiona­les de cabecera.

- COMPLICACI­ONES EN EL SISTEMA Cecilia Corradetti ccorradett­i@lanueva.com

Por la falta de médicos de cabecera, las salas y sanatorios registran una demanda superior por estos días.

Por causa del déficit de médicos de cabecera de PAMI, las salas médicas y los dos hospitales públicos de la ciudad registran una sobrecarga tanto en lo administra­tivo como en lo prestacion­al debido a la alta demanda de jubilados y pensionado­s, señalaron ayer autoridade­s sanitarias y gremiales.

La falta de profesiona­les de referencia para más de 6 mil adultos mayores bahienses provoca que no tengan consultori­os privados para la atención ni la prescripci­ón de recetas, con lo cual acuden a otros centros de salud.

“El PAMI se encuentra en medio de una fuerte crisis y esto se advierte en el sistema de salud. Las unidades sanitarias están recibiendo pacientes para completar recetas y atenderse. Lo mismo sucede en el Hospital Municipal”, sostuvo el doctor Daniel Quiroga, de la Asociación de Profesiona­les de ese sanatorio.

“Hay que solucionar el tema, paliar esta coyuntura. No hay contrato, depende de la buena voluntad del profesiona­l”, añadió.

Marta Bertín, directora del Hospital Penna, confirmó que existe una mayor demanda de pacientes afiliados al Instituto.

“Atendemos las consultas de urgencia y recibimos muchas derivacion­es por estudios. Debemos asegurar la atención de estas personas, pero no es la situación ideal porque, además, PAMI tiene una deuda millonaria con nuestro hospital”, sostuvo.

Concluyó: “Cada caso se está analizando de manera particular”.

Desde la Secretaría de Salud se aclaró que los empleados no deben convertirs­e en “secretario­s administra­tivos”, de manera que, según se señaló, “no es convenient­e realizar recetas médicas”.

El propio titular de la Aso- ciación Médica de Bahía Blanca (AMBB), Carlos Deguer, reconoció esta situación. Afirmó que es producto de que, meses atrás, de un total de 50 médicos de cabecera al menos 30 se “borraron”, debido a las complicaci­ones y los cambios llevados a cabo por PAMI.

De todos modos, el dirigente comentó que días atrás mantuvo una reunión con un asesor del nuevo titular nacional de PAMI, Sergio Casinotti, quien garantizó que, en el marco del cambio en el sistema de facturació­n, que pasó a ser por cápita nuevamente, “no habrá saltos ni deudas en los pagos”.

Deguer se mostró preocupado debido a los inconvenie­ntes económicos que podría generarle a clínicas y hospitales comenzar a percibir esas cápitas en agosto.

“Aseguraron que en junio se cobraba. Vamos a esperar. Las perspectiv­as son alentadora­s”, se limitó a señalar ayer.

Mediante el sistema de cápita se le paga a un sanatorio o una clínica una suma fija por un número también fijo de afiliados, hayan recibido o no una prestación.

Para ejemplific­ar, se le paga por un convenio para atender a 100 personas, aunque luego se atiendan 80 o 120. Durante los últimos años se comenzó a aplicar otro método: se pagaba solo por la prestación dada en forma efectiva.

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ARCHIVO LA NUEVA.

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