Economía.
Las hortalizas, entre ellas se incluye a la cebolla que se produce en el sur del sudoeste bonaerense, están padeciendo por los altos costos y la falta de inversiones.
El sector tambero evidencia una drástica caída de la producción, pero al mismo tiempo una incipiente recuperación de precios.
La papa, que también ha incrementado su producción en los distritos de Villarino y de Patagones, atraviesa una baja institucionalización de la cadena, así como la mandioca tiene falta de rentabilidad y se aprecia la importación de fécula.
El vino y el mosto tienen problemas climáticos y de mercado, así como la yerba mate tiene una sobreoferta, sin mercado externo y precios estancados.
En el otro extremo, una grave crisis atraviesan las peras y las manzanas, con una drástica caída productiva y de área, así como el tabaco que, a esta altura, sabe que necesariamente debe diversificar su producción.
En el documento se plantean cuestiones de infraestructura, donde se impulsa el desarrollo basado en los pilares hídrico, vial y energético para darle sustentabilidad a la política rural.
Se muestra la necesidad de una financiación del capital de trabajo adecuada a los ciclos productivos y se resalta la importancia de la creación de líneas crediticias que cuenten con años de gracia y tengan intereses razonables.
También se promueve una política monetaria que incentive la producción industrial y local. Así, la entidad propone la creación de cajas de crédito cooperativas rurales y la conformación de una Sociedad de Garantía recíproca (SGR) abocada a la cooperativa.
La última semana se realizó la 61° asamblea anual ordinaria de la Coninagro en la que se ratificó a Carlos Iannizzotto como presidente para el período 2016/2018, al necochense Egidio Mailland como vicepresidente y al bahiense Ricardo Vitale, de la Cooperativa de Horticultores, como síndico suplente.
También se homenajeó al consejero Carlos Bories, de Espartillar, quien falleció el último 7 de septiembre y se colocó su nombre a la sala del consejo de administración. Se descubrió una placa ante la presencia de su esposa Patricia Luke y de sus tres hijos.