Gran impacto avizora el agro por la suba del inmobiliario
El vicepresidente de la SR de Pigüé, Roberto Cittadini, acusó a Agroindustria bonaerense. También dijo que la suba será de hasta el 60%. En Dorrego se pagarán $ 45.000 anuales por un campo de 300 Has. En Chacabuco, $ 500.000.
El aumento en el impuesto rural bonaerense previsto para 2018 hace que los productores estén con la calculadora en mano. Por ejemplo, para un predio del sudoeste, ganadero o agrícola, hablan de una suba del 57%. "Nos engañaron: el inmobiliario rural iba a seguir a la inflación", dijo a este diario el vice de la Sociedad Rural de Pigüé, Roberto Cittadini.
“Nos sentimos frustrados. No conseguimos casi nada de lo que llevábamos en carpeta para analizar y rever. Y nos engañaron porque hace tres semanas dijeron que el aumento del inmobiliario rural iba a seguir la inflación”.
Lo dijo Roberto Cittadini, vicepresidente de la Sociedad Rural de Pigüé y prosecretario de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa, respecto del impacto —calculado desde la propia Carbap—, del incremento del impuesto en la provincia para 2018 que será, por lo menos, del 50%. La inflación estimada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) para el mismo período será de entre el 10 y 12%.
“El agro no ha sido contemplado en esta ocasión”, agregó.
“Nos dicen que hay una baja en los ingresos brutos, pero es para las pymes que facturan hasta $ 78 millones anuales. En nuestro sector se ha contemplado hasta los 3 millones de pesos, cuando nosotros pretendíamos que sea de $ 8 o de $ 10 M”, indicó.
El aumento no será para todos, ya que desde Agroindustria se aseguró que la excepción se mantendrá para las superficies menores a 50 hectáreas y/o con valor fiscal de 3 millones de pesos.
Según los números de Carbap (ver infografía), en un campo del sudoeste bonaerense, para un predio de 380 hectáreas del distrito de Tornquist y respecto del kilo de novillo vivo, el productor deberá incrementar su producción en un 57%.
En el caso de trigo, un porcentaje semejante será para un establecimiento, en el mismo SOB e igual número de hectáreas, donde el chacarero deberá producir el 57% más —en toneladas— para poder cubrir el aumento del IIR.
Un cálculo más real contempla, por ejemplo, lo que sucederá con un productor con 300 hectáreas en el distrito de Coronel Dorrego. Este año pagó alrededor de 100 pesos por hectárea ($ 30.000 anuales) y ahora abonará, en el mejor de los casos, $ 45.000. Pero algunas parcelas del mismo partido, las más mediterráneas, prevén pagar entre 200 y 270 pesos por hectárea ($ 81.000).
“A esto hay que sumarle el impuesto complementario que, en muchos casos, será semejante al que pagarán como IIR”, agregó Cittadini.
“En el SOB creemos que el incremento será de alrededor del 60%, más allá que a último momento la oposición logró evitar otra caída en los beneficios para los doce distritos del Plan de Desarrollo del Sudoeste Bonaerense”, añadió Cittadini.
En la zona núcleo de Pergamino, la más rica de Buenos Aires, el productor que pagaba 300.000 pesos, también por 300 hectáreas, ahora deberá abonar $ 450.000 por año.
En un campo agrícola sojera, de 130 hectáreas en Chacabuco, el productor deberá incrementar su producción en un 34% para cubrir el aumento del IIR.
En Trenque Lauquen, en un tambo de 320 hectáreas, el tambero deberá subir su producción en el 36%, medidos en litros de leche.
“Tampoco pudimos modificar el sellado de las operaciones, que ahora será del 10,5% para todas las que se deban realizar, ya sea dentro del distrito como por afuera. Es casi el 40% más”, dijo.
“Al pago del inmobiliario rural hay que sumarle el Complementario que, en muchos casos, será semejante al que se pagará como IIR”, sostuvo Cittadini.