Bien al estilo Pepe Sánchez

La anécdota tuvo como escenario el despacho de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal. Dejó en claro la perplejidad de la mandataria provincial cuando Pepe Sánchez acudió para explicarle, paso a paso, su último gran sueño: el Centro de Entrenamiento y nuevo hogar de Bahía Basket.

Entonces Vidal, con la sorpresa dibujada en su rostro, y también encantada por la idea global del proyecto, le preguntó: "¿pero cómo, no me va a pedir nada?". La respuesta fue simplemente "no". Sólo se trataba de mostrarle un proyecto que ya había tenido su inicio formal. En Aldea Romana, con los trabajadores instalando los primeros cimientos y pilotes.

Y bien al estilo Pepe. Sin estridencias. Anunciándolo oficialmente recién cuando ya había cobrado vida. En la más rotunda realidad.

Un centro diseñado para el atleta del futuro, llamado a ser el mejor de Latinoamérica. Y solventado con fondos privados.

Que también potenciará el basquetbol social, en una especie de continuidad del plan que se desarrolla en el Polideportivo Norte, donde Bahía Basket generó un ámbito moderno y saludable mediante una escuela de Básquet Social. Gratuita para los chicos del sector.

*** El emprendimiento resulta, al cabo, un positivo mensaje para los bahienses.

De esos que invitan a soñar con nuestras potencialidades.

Que no sólo pasan por fenómenos individuales, como el caso de Pepe.

O por ser un punto estratégico en el mapa, con un puerto de aguas profundas que sigue sin tener techo.

Sino, más bien, por la tosudez, creatividad, perseverancia, talento y honestidad intelectual necesarias para cruzar la delgada línea que va entre la amarga vara de lo imposible y esa que, aún muy alta, debemos atrevernos a sortear.

Y si es con células de trabajo como las que lidera Juan Ignacio Sánchez, sin apelar al simplismo de depender en demasía del Estado, muchísimo mejor.

Lejos de cualquier eslogan político, quedó en claro que para tipos como Pepe, sí se puede...