Incertidumbre de los trabajadores por el futuro de los Talleres Maldonado
El 15 de marzo la empresa dejará de existir y las instalaciones pasarán a la Nación. Hoy por hoy existe pesimismo sobre el futuro de unos 70 trabajadores.
Horas de incertidumbre se viven en los talleres ferroviarios de Coronel Maldonado, donde aún sigue siendo incierto el futuro de unos 70 trabajadores.
Si bien la situación empeoró luego de conocerse el decreto de la gobernadora María Eugenia Vidal que dispone la disolución de Ferrobaires a partir del 15 de marzo y el traspaso de los trenes a la Nación, de hecho esta situación ya se había producido mucho antes.
En el caso de Bahía Blanca unos 20 maquinistas pasaron a revistar en Trenes Argentinos, la empresa que tiene a cargo los servicios de pasajeros entre la Estación Sud y Plaza Constitución, con unidades fabricadas en China.
Hasta ahora sigue siendo una incógnita el futuro de 70 trabajadores que revistan en los talleres Maldonado, aunque las versiones en tal sentido no son demasiado alentadoras.
Trascendió que esos empleados, que no pasaron a la Nación, serían llamados a presentarse en Plaza Constitución.
Sobre este punto las versiones no son coincidentes, por cuanto están las que aluden a la posibilidad concreta de despidos, mientras otras mencionan la alternativa de un plan de retiro voluntario o incluso de algún eventual traslado.
En medio de la falta de información oficial, el gobierno de La Pampa anunció que tomará a los 21 empleados de Ferrobaires que trabajaban en esa provincia.
Pero más allá de la situación de angustia que envuelve a los trabajadores bonaerenses y a sus familias, también es incierto el futuro de las centenarias instalaciones ubicadas en el extremo oeste de la ciudad.
Si bien es cierto que muchas de sus instalaciones y equipos hace décadas que resultan obsoletos -y que su mayor rique- za reside en la formación y capacidad de no pocos de sus empleadosexistiría la posibilidad de concesionar el predio al sector privado, aunque no ya orientado principalmente a la industria ferroviaria, sino a reparaciones generales.
Los talleres Maldonado fueron, junto a los de Spurr y Bahía Blanca Noroeste, el corazón del sistema de mantenimiento ferroviario en Bahía Blanca y la región.
Con esta decisión sólo continuará funcionando el más moderno de los tres (Spurr). El futuro de Maldonado es una incógnita y el lamentable saqueo y destrucción del Bahía Blanca Noroeste ya es conocido por todos.
Ahora el gobierno nacional anunció que licitará la venta o alquiler de vagones y locomotoras pertenecientes a Ferrobaires, una empresa que comenzó a desaparecer mucho antes.
Ya en junio de 2016, cuando Vidal decidió cortar los servicios de Ferrobaires el sistema de mantenimiento recibió un duro golpe y si bien en 2017 se recuperaron las frecuencias con trenes chinos de la Nación, su mantemiento general no se realizaba en Maldonado.
Ferrobaires había nacido en 1993, año en que Eduardo Duhalde decidió hacerse cargo de los servicios que Carlos Menem quería cerrar.
Su primer nombre fue Unidad Ejecutora del Programa Ferroviario Provincial (UEPFP).
Desmanejos, malas decisiones y casi nula inversión, terminaron haciendo de Ferrobaires un servicio virtual y no una realidad concreta capaz de garantizar, con trenes dignos, el transporte de miles de bonaerenses que no merecieron viajar --por más baratos que hayan sido los boletos-- en formaciones inseguras, lentas, provistas de baños, asientos, luces y ventanillas en deplorable estado.
En 23 años de actividad la empresa perdió 1.099 kilómetros de vías, dejó de prestar muchísimos servicios y “por arte de magia” redujo el 90% de las locomotoras y el 80% de los vagones que tenía dos décadas atrás.
Como contrapartida a ese achique y saqueo, un par de años atrás poseía 2,5 veces más empleados que hace 15 años y había multiplicado por 13 su presupuesto desde 2003.
Hace cinco años, un informe realizado por diputados provinciales del FAP Alfredo Lazzeretti y Ricardo Vago, señaló que Ferrobaires recaudaba por venta de pasajes menos del 10% de su presupuesto, siendo el servicio subsidiado en más del 90% de su presupuesto de funcionamiento.
Si los talleres Maldonado dejan de funcionar, en Bahía Blanca quedará solo un taller ferroviario, el de Spurr, a cargo de la empresa Ferroexpreso Pampeano.