Esperada dinámica para la exportación
El arranque comercial del ciclo 2017/18 anticipa que la Argentina puede anotar, nuevamente, un excelente desempeño exportador, tal como lo hizo en el ciclo previo cuando se embarcaron más de 12,5 millones de toneladas.
Al importante tonelaje con destino al sudeste de Asia y el norte de África, se sumará un interesante volumen que tendrá a Brasil como destino. Es decir, la demanda exportadora estará activa por largo tiempo.
La molinería tiene que actuar en consecuencia: mantener presencia en el mercado para hacerse del tonelaje requerido para cumplir su programa de molienda proyectado en 6 M/T.
Queda claro que el escenario descripto refleja un mercado local competitivo que permite proyectar precios sostenidos para el trigo local. Incluso, se puede prever algún dólar más.
Al último miércoles 24, el sector exportador cerró compras de trigo 2017/18 por un volumen de 8 M/T; esto es, un 23% más que el tonelaje adquirido en igual período del ciclo previo. Y, más interesante aún: reporta declaraciones juradas de venta al exterior por 6 M/T, lo cual refleja un volumen de negocios cerrados hacia diversos destinos que trepó un 22% frente al informado a igual fecha de 2017.
Transitados sólo dos meses del año comercial 2017/18 (diciembre-enero), ya se han negociado 9,6 M/T de trigo. Es decir, el 55% de una producción país estimada por diversos operadores del mercado en 17,5 M/T. Dicho guarismo se posiciona muy por encima del promedio de comercialización de los últimos años. Los despachos de trigo aseveran lo expuesto. De acuerdo con las cifras de Agroindustria, durante diciembre se embarcaron 1,7 M/T del trigo 2017/18, a lo cual se debe adicionar un volumen cercano a los 2 M/T correspondiente a enero. Así, ya se concretó el envío de 3,7 M/T de trigo argentino.
El complejo exportador del puerto de Bahía Blanca no es ajeno a este fenómeno. Para las dos primeras semanas de este mes se anuncia el arribo de 9 buques, que demandarán más de 225.000 toneladas.