La actividad sica reduce el dolor de la osteoartritis
Moverse –o, más precisamente, mover las articulaciones– es el camino para mitigar el intenso dolor.
s una reacción natural, instintiva: algo nos duele y tratamos de mantenerlo quieto. Eso vale para una rodilla, una mano o lo cualquier otra parte del cuerpo. El miedo a exacerbar el dolor nos lleva tomar esa precaución.
Sin embargo, en los que refiere al dolor de las articulaciones causado por la osteoartritis, las recomendaciones son contrarias al saber popular que nos lleva a la quietud.
Moverse –o, más precisamente, mover las articulaciones– es el camino para mitigar el dolor y combatir esa enfermedad degenerativa de las articulaciones. Y eso es lo que acaba de recomendar la Fundación de la Artritis (Arthritis Foundation) de los Estados Unidos.
“El ejercicio es un componente clave para mejorar la salud de las personas con osteoartritis”, sostienen desde dicha fundación, al tiempo que explican que “puede resultar difícil, sobre todo al principio, pero hay estudios que han mostrado que el ejercicio no solo ayuda a reducir el dolor, sino que también mejora la movilidad”.
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Eal dolor de la osteoartritis. Pero, ¿qué es la osteoartritis?
Conocida también como enfermedad articular degenerativa, artrosis, osteoartrosis o artritis hipertrófica, la osteoartritis es una de las enfermedades más antiguas y comunes entre los seres humanos.
Cuando una persona tiene osteoartritis, el cartílago de las articulaciones se encuentra desgastado, lo que puede causar dolor y rigidez en las articulaciones, explica la Fundación de la Artritis.
Sus síntomas pueden afectar a cualquier articulación, pero ocurre más a menudo en las pequeñas articulaciones de las manos y en la que se encuentra en la base del dedo gordo del pie. También suele afectar las caderas, rodillas y la columna vertebral, pero rara vez afecta las muñecas, los codos o los tobillos.
Según la Asociación Argentina de Cirugía de la Mano (AACM), la osteoartritis afecta a entre un 25% y un 75% de la población adulta. En el caso de la osteoartrosis de la mano, por ejemplo, esta está presente en el 50% de los mayores de 60 años.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, la considera la enfermedad degenerativa más presente en la población adulta de todo el mundo.
Empezar a moverse
Pero si el movimiento es fundamental para combatir el proceso degenerativo de la osteoartrosis y, al mismo tiempo, el mover la articulación afectada puede causar dolor, ¿cuál es el camino?
La Arthritis Foundation sugiere comenzar lenta y progresivamente. Lo primero es caminar. Luego puede ser útil ir sumando a la rutina algunos ejercicios de fortalecimiento, que ayudarán a crear músculo alrededor de la articulación afectada por la osteoartritis, protegiéndola. También son útiles los ejercicios de estiramiento, pues permitirán que las articulaciones se vuelvan más flexibles y menos rígidas.
“Empiece con estiramientos suaves que hagan que sus articulaciones realicen su rango de movimiento completo”, recomienda la Fundación. “Además de caminar, otras buenas opciones son andar en bicicleta, los ejercicios aeróbicos acuáticos, nadar y bailar".
El yoga y el tai chi pueden ayudar a aliviar la rigidez y mejorar la flexibilidad. Pero más allá de la actividad que elija, debe realizarse con suavidad.