El formador Adrián Gallará cree que Argentina posee una gran cantera de cracks
Estuvo 7 años trabajando como coordinador de Deportivo La Guaria, de Venezuela. Volvió al país y a los 3 días lo llamó Hermes Desio para ser ayudante de Diego Placente en la Sub 15.
“Lo de Sergio (Romero) nos dolió a todos. Se acercaba a hablar con los chicos; la última vez estuvimos como 40 minutos. Eso se llama grandeza”.
El ayudante de campo es, acaso, el personaje menos expuesto del mundo futbolero. Es quien acompaña las decisiones del director técnico y, además, protege su legajo a la sombra del nombre que se expone.
Generalmente son gente de confianza y adherentes a la línea de pensamiento del DT, pero también sienten y viven el fútbol a su manera, generando lazos más fuertes con los jugadores y hasta, en algunos casos, siendo confidentes en los problemas extrafutbolísticos.
“Estamos para colaborar con todo. El futbolista suele tener más confianza con el ayudante y le traslada sus inquietudes, pero también comulga con la ideas del técnico y trabaja para que los jugadores las interpreten”, dijo Adrián Gallará, quien desde mediados del año pasado se desempeña como ayudante técnico de Diego Placente, en el seleccionado argentino Sub 15.
Gallará esperaba tranquilo en el Aeropuerto bahiense para tomar el vuelo vespertino del día miércoles con destino a Capital Federal. Todo transcurría con normalidad hasta que un par de fotos de Sebastián Cortés y la entrevista realizada Nueva. por La captó la atención de los presentes.
“Nadie me conoce (risas). Mi recorrido en el fútbol pasa por la enseñanza, porque nunca fui un futbolista destacado pero sí me preparé de la mejor manera para ser técnico. Ahora estoy en un lugar de privilegio, con los chicos argentinos. Me llamó Hermes Desio (coordinador de las categorías juveniles de AFA), un amigo de la infancia, cercano a mi lugar de origen”, señaló Gallará.
--¿Qué cambió en tu vida en este último año?
--Todo. Llevaba 7 años como coordinador de las divisiones inferiores del club Deportivo La Guaira, de Venezuela. Mi vida transcurrió allí hasta que la situación social y económica no daba para más y junto a mi familia decidimos volver.
--¿Esperabas llegar al país y ser llamado por Hermes Desio?
--No, jamás. Llegué el martes 26 de junio y el domingo a la noche me llamó Desio: “Tino, estás acá en Camilo Aldao. Mañana te llamo”, me dijo. Y al otro día me ofreció trabajar en el Sub 15. Pensé que era una broma. Me dijo: `El lunes tenés que estar en Ezeiza'. Pero no tenía auto y me hizo ir a Corral de Bustos para llevarme él. Un grande.
--¿Qué te llamó la atención del predio de Ezeiza?
--Las instalaciones, el piso de las canchas de fútbol y la organización. Argentina es potencia mundial porque tiene una gran infraestructura, un material humano increíble y chicos que son maravillosos en todos los sentidos, empezando por el respeto hacia la gente que allí trabaja.
--¿Cómo es trabajar con Diego Placente y Hermes Desio?
--Son gente muy preparada, con una enorme trayectoria futbolística. De todas manera, lo que más se valora es que son buenas personas y que es una generación nueva que se está haciendo camino.
--El año pasado ganaron por primera vez un Sudamericano Sub 15. Era una cuota pendiente.
--Se venía negando. Y fue muy lindo, una experiencia increíble. Argentina venció en la final a Brasil (3-2) y los chicos lo celebraron sin sobrar al rival, porque siempre está esa pica con ellos.
--¿No hubo cánticos ni dedicatorias?
–No. Costó mucho dar vuelta el 0-2, pero nadie se volvió loco; los chicos fueron muy respetuosos. En el Mundial de Brasil los hinchas cantaban “Decime que siente...”, pero acá se acercaban a nosotros y nos decían: “Sentimos orgullo y haber pertenecido a este grupo”. En el vestuario se vivieron momento muy lindos durante el festejo.
--¿Argentina tiene potencial?
--Sí. Hay jugadores con un futuro enorme. Argentina, en fútbol, posee una gran cantera de cracks. Por lo general los argentinos somos bastante exitistas. Escuchaba la nota de Javier (Mascherano) y parece mentira que cuestionemos a jugadores que jugaron 3 finales. ¿Sabés lo que es salir segundo en el mundo? ¿Sabés lo que daría por ser el segundo técnico en el mundo?
--Pero el hincha quiere ganar siempre.
--Tenemos que pisar un poquito la pelota, ser más responsables; y toda esta pasión canalizarla mejor.
--¿Cómo se arma un grupo ganador?
--Jugadores con dinámica, técnica y personalidad. Pero también se necesitan los que alegran al grupo, como el lateral de River (Luciano Vega), a quien apodaron "Rey", porque siempre está animando a todos, contagiando buena onda.
--¿El jugador de la Selección mayor marca distancia?
--Nooo. Son humildes, y siempre tienen ganas de demostrar. Se quieren dar una alegría a ellos mismos, a sus familias y al país. Sienten la camiseta.
--¿Tuvo la posibilidad de cruzarse con Messi?
--Lo vemos siempre. El otro día pasó y nos saludó, porque estábamos junto con Pablo (Aimar) y Diego (Placente); son muy respetuosos. Yo no soy nadie acá, pero vino Mascherano, nos dio la mano y se quedó hablando.
--¿Cómo viviste la desafectación de Sergio Romero?
--(Se emociona). Con dolor. Romero se acercó a la utilería de las divisiones inferiores, en el Complejo 1, y se quedó tomando mate con todos. Hablamos como 40 minutos; eso se llama grandeza.
"Todos sentimos su salida. Sabemos de qué madera están hechos y no conozco a ninguno que sea mala gente".
--Bahía viene aportando jugadores de calidad.
--Sí. Rodrigo (Palacio), Germán (Pezzella) y Lautaro (Martínez), que son enormes jugadores. Ustedes los conocen mejor que nadie, son pibes humildes, merecen lo mejor.