Singapur recibió a Trump y Kim con gran expectativa
La cumbre entre los mandatarios de Estados Unidos y Corea del Norte se llevará a cabo mañana en la isla de Sentosa. Notables medidas de seguridad.
Singapur recibió ayer a Donald Trump y Kim Jongun en un ambiente de enorme expectativa, en el que no faltan imitadores de los mediáticos políticos ni los negocios que sacan provecho con hamburguesas y tacos conmemorativos.
La próspera ciudad-estado se ha volcado en los preparativos de la histórica cumbre que celebrarán mañana los líderes de EE.UU. y Corea del Norte, que han llegado ya a Singapur rodeados de evidentes medidas de seguridad y entre un gran secretismo en el caso de Kim.
El Gobierno de la neutral Singapur ha desembolsado 15 millones de dólares estadounidenses (12,7 millones de euros) para un evento que, ha dicho, le podría aportar una importante proyección, además de seguridad y estabilidad a la región.
“Nos da publicidad”, reconoció ayer el primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, durante una visita al centro de prensa que las autoridades han puesto en funcionamiento en la zona de la Marina de Singapur, a unos 6 kilómetros de la isla de Sentosa, donde se celebrará la cumbre.
El encuentro, el primero de la historia entre líderes de los días previos a la cumbre.
En un céntrico centro comercial al aire libre, Howard X y Dennis Alan anticipaban entre medios y curiosos el apretón de manos que con toda probabilidad se darán el líder norcoreano y el presidente estadounidense cuando mañana se vean cara a cara por primera vez.
Los suplantadores, uno hongkonés y otro estadounidense, protagonizaron durante el fin de semana la llamada “cumbre verdadera”, como parte de una campaña de promoción de una aplicación para móviles.
Cientos de personas esperaban ayer en fila pacientemente para fotografiarse con los falsos Trump y Kim, después de haber pagado 15 dólares singapurenses (9,5 euros) para bajarse la aplicación y 40 (25,5 euros) en el caso de los que querían acceso rápido.
El arsenal nuclear de Pyongyang, que le ha valido varias sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU y amenazas de acciones militares del gobierno de Trump, será el eje central de la agenda.
Poner un punto final formal a la Guerra de Corea, 65 años después del fin de las hostilidades también estará sobre la mesa en el primer encuentro de la historia entre el líder norcoreano y un presidente en ejercicio de su “enemigo imperialista”.
Kim se reunió a su llegada con el presidente de Singapur, Lee Hsien Loong, mientras Trump arribó en horas de la noche.