Un internado por día por el abuso de drogas psicoactivas
La cifra surge de un relevamiento realizado en el Hospital Municipal. El consumo de alcohol es el principal problema, seguido por la utilización de psicofármacos y cocaína.
Un relevamiento a nivel provincial determinó que uno de cada tres jóvenes probó drogas duras. Según el informe, alcohol, psicofármacos, cocaína y marihuana son las sustancias que más se consumen. En Bahía, en los últimos años al menos una persona por día fue internada en el Hospital Municipal por el consumo abusivo de algún componente psicoactivo.
Una encuesta realizada a nivel provincial determinó que uno de cada tres jóvenes probó drogas duras.
Alcohol, psicofármacos, cocaína y marihuana son las sustancias que más se consumen, y la mayor parte de los consultados consideraron que es fácil obtenerlas.
Los resultados alertan y preocupan, pero también deben ocupar, porque la realidad en nuestra ciudad no parece ser diferente.
Según datos a los que tuvo Nueva., acceso La en los últimos años se ha registrado un promedio de una persona por día que debe ser internada en el Hospital Municipal de Agudos Doctor Leónidas Lucero como consecuencia del consumo abusivo de alguna sustancia psicoactiva.
“Es un porcentaje importante. Son algo más de 350 por año en ese centro asistencial, es decir, una persona diaria. Eso es solo la punta del iceberg, porque son los que llegan a estar en una situación de suficiente gravedad para ser intervenidos en una institución de salud”, considera el psicólogo Hugo Kern, responsable del área de Salud Mental y Adicciones.
Las cifras corresponden a un trabajo que viene realizando desde hace un tiempo el profesional como tésis de una maestría.
En este sentido, destaca que respecto del total de los problemas de salud que sufre la población que concurre al hospital, aquellos vinculados a intoxicaciones con alcohol u otras drogas representan alrededor del 2,5%.
“Hay que tener en cuenta otros problemas derivados del consumo que no se encuentran comprendidos por la estadística, como son las enfermedades digestivas o las derivadas del uso del tabaco”.
Kern describe que “los días conflictivos son viernes, sábado y domingo, o los lunes cuando son feriados. La jornada de mayor ingreso de pacientes con este problema es el domingo”.
Explica que las cifras son similares a lo largo del año y que la mayor parte de los internados por abuso de sustancias son hombres.
“En el caso de problemas con psicofármacos, la mayoría son mujeres. Los números son similares en los últimos años, solo en 2012 se registró un pico de situaciones por consumo de cocaína”.
El enemigo
El psicólogo comenta que la situación más grave a nivel de la problemática de adicciones en Bahía Blanca es "el consumo episódico y abusivo de alcohol durante los fines de semana".
“Es la principal droga de acción. Es un problema extendido, que se manifiesta por las consultas que se dan en la guardia de los hospitales o por intervenciones de los equipos. La primera sustancia con la que se experimenta culturalmente es el alcohol”.
Explica que también se advierte una tendencia creciente al uso de psicofármacos con o sin recetas.
“Es la utilización de sustancias médicas con fines recreativos. La extensión del uso de psicofármacos en nuestra sociedad hace que haya cierta disponibilidad, porque se encuentra en el botiquín de cualquier casa”.
“Posteriormente se encuentra la experimentación con cocaínas. Lo digo en plural porque al tratarse de sustancias ilegales, es posible que algunas reemplazen a otras. Es probable que la persona piense que está consumiendo cocaína, cuando en realidad son metanfetaminas o algún derivado”, sigue diciendo.
En tanto, califica como “un caso aparte” el consumo de cannabis.
“El uso está extendido en nuestra sociedad y se ha incrementado cierta tolerancia social, lo que ha hecho que, de alguna manera, se naturalice el uso. La verdad es que los inconvenientes devenidos por un uso problemático son mínimos con relación a las anteriores”.
Respecto de las drogas sintéticas, sostiene que “están incluidas algunos psicofármacos y se encuentran acotadas a una práctica puntual o modalidad de gestión de la vida recreativa. No está tan extendido y forma parte de una subcultura dentro de la cultura de la vida recreativa. Sabemos del uso y que ha generado algunos inconvenientes, pero no llegan a desplazar la conflictividad generada por las otras sustancias”.
Acceso
En coincidencia con la encuenta realizada en 135 municipios bonaerenses, Kern refiere que la gran mayoría de las personas que manifiestan problemas con sustancias “dicen saber dónde conseguirlas”.
También menciona que las situaciones de mayor riesgo se presentan a partir de las combinaciones de alcohol con el resto.
“Hay algunos usuarios de drogas que tienen conductas de autocuidado, como por ejemplo no mezclar sustancias o mantenerse hidratados. Pero hay otros que en una etapa de experimentación no toman recaudos”.
Finalmente, asegura que “en nuestra sociedad hay un incremento en las conductas de riesgo por parte de la población. De jugar al límite, de estar en el borde y hacer cosas dañosas. Hay una tendencia y se nota en una escala importante”.