La biotecnología, otra inversión para los agricultores
directivo de Red Surcos.
Sin aumento, por ahora
Calvo precisó que, por estos días, están subiendo —en sus países de origen— los precios de los principios activos que se usan en la Argentina para elaborar los agroquímicos.
“Eso pone de manifiesto que, en algún tiempo más, los insumos que compran los productores comenzarán a subir acá también”, anticipó.
La circunstancia se da para los casos del glifosato, de varios graminicidas y del acetoclor, entre otros.
La pregunta es por qué suben los principios activos en el principal productor mundial de esos insumos, que es China.
“La respuesta es porque, en gran medida, los chinos sigue aplicando una política de medio ambiente cada vez más estricta, que está llevando a que cierren o se paralicen muchas industrias dedicadas a esta actividad”, manifestó.
“La contaminación en las ciudades chinas es un problema cada vez más grande y el gobierno de Pekín parece haber decidido encarar el tema de manera profunda y sostenida en el tiempo”, sostuvo.
“Estas situaciones externas impactan en el mercado local y hay que seguirlas de cerca", comentó.
“Pero aquí, más allá de las dificultades del año que pasó, que incluyó inundaciones en un comienzo y una fuerte sequía en algunas zonas durante el verano, la campaña que termina ha sido muy buena”, dijo Calvo.
Un futuro sustentable
Mirando la coyuntura y el Semillas. Según la ISAAA, la biotecnología sigue siendo una gran inversión para los agricultores: por cada dólar invertido en semillas OGM, obtuvieron U$S 3,49.
Soja. Por más de 21 años, los cultivos transgénicos han sido los responsables de la producción adicional de 213 M/T de soja; 405 M/T de maíz, 27,5 M/T de fibra de algodón y 11,6 M/T de canola.
Comparación. El área destinada a cultivos transgénicos en el mundo siguió aumentando en 2017, hasta alcanzar los 189,8 M/H en comparación con 185,1 M/H de 2016.
Países. En 2017, 24 países sembraron cultivos OGM, de los cuales 19 fueron países en desarrollo y 5 países industrializados. Además, otros 43 países, que no se dedican a la agricultura, autorizaron la importación y uso de cultivos transgénicos para alimentación humana y animal. largo plazo, Sebastián Calvo sostuvo que la industria de los agroquímicos en la Argentina debería ir pensando en hacer inversiones que le permitan crecer y ser más sustentable.
“Hay que tener en cuenta esto para las cuestiones productivas en las plantas de fabricación, como en los perfiles medio ambientales de los productos que se elaboren”, indicó.
También dijo que se están ampliando líneas de producción e instalando nuevas, además de incorporar más reactores químicos y envasadoras para aumentar la capacidad.
Más allá de las empresas, los conocedores del mercado insisten en recomendar a los productores ir posicionándose a los precios actuales de los insumos, antes de que se aceleren los aumentos.
“Los cultivos genéticamente modificados (OGM), también llamados transgénicos o biotecnológicos, ofrecen enormes ventajas para el ambiente, la salud de las personas y de los animales, y contribuyen a mejorar las condiciones socioeconómicas de los agricultores y del público en general”.
Lo señaló el presidente del consejo directivo del Servicio Internacional de Adquisición de Aplicaciones de Agrobiotecnología (ISAAA), Paul S. Teng.
El principal país que contiene cultivos transgénicos es Estados Unidos, con 75 M/H; seguido por 2) Brasil, con 50,2 M/H; 3) Argentina, con 23,6 M/H; 4) Canadá, 13,1 M/H; 5) India, con 11,4 M/H y 6) Paraguay, con 3 M/H.
“La reciente producción de cultivos transgénicos de última generación, como manzanas y papas que no se oscurecen ni deterioran; el ananá súper-dulce enriquecido con antocianinas; el maíz con mazorcas de mayor biomasa y altos niveles de amilosa; y la soja con contenido modificado de aceite, además de la autorización para comercializar caña de azúcar resistente a insectos, permiten ofrecer más variedad a los consumidores y los productores de alimentos”, agregó.
El informe del ISAAA muestra que el área de cultivos GM en todo el mundo aumentó un 3 % o 4,7 M/H en 2017. El aumento se debe, principalmente, al incremento de las ganancias provocado por los elevados precios de las materias primas, la mayor demanda de los mercados, tanto locales como internacionales, y la disponibilidad de semillas con nuevas tecnologías.
Los países en desarrollo totalizan el 53 % del área de cultivos modificados mediante biotecnología en todo el mundo.
Entre 1996 y 2016, PG Economics informó que a partir de los cultivos GM se obtuvieron ganancias de U$S 186,1 mil millones para unos 17 millones de agricultores, muchos de los cuales eran mujeres o pequeños agricultores responsables del único sustento de sus familias y comunidades.
El estudio de PG Economics también indica que se han hecho grandes avances para reducir la huella de carbono de la agricultura, mitigar el cambio climático y adaptar los cultivos a dicho cambio.
El último estudio destaca cómo el uso de la biotecnología en la agricultura sigue contribuyendo en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.