Se firmó el contrato para mantener la profundidad del sistema portuario local
Las obras de dragado fueron adjudicadas en 22 millones de dólares a la UTE que conforman Boskalis y Jan de Nul. Los trabajos comenzarían en los próximos días.
El martes pasado, en horas de la mañana el Consorcio de Gestión del Puerto de Bahía Blanca firmó con las empresas adjudicatarias el contrato que permitirá realizar el dragado de mantenimiento en el canal de acceso al sistema portuario regional.
Las obras estarán a cargo de la unión transitoria de empresas que conforman Boskalis International b.v. suc. Argentina y Compañía Sudamericana de Dragados S.A., que es subsidiaria de la belga Jan de Nul.
Participaron del acto y rubricaron el documento contractual, en representación del CGPBB, su presidente, Miguel Donadío y su director secretario, Enrique Fortunato, mientras que por la mencionada UTE contratista lo hicieron los ingenieros Marcelo Persichini y Leticia Silva Mendes.
La escribana Silvia Suarez Bras certificó las firmas y procedió a la protocolización del instrumento.
Los trabajos comprende las siguientes obras: Dragado de mantenimiento de las condiciones de navegabilidad en el canal de acceso al sistema portuario de Bahía Blanca; dragado en los canales de acceso a la Base Naval Puerto Belgrano y a Puerto Rosales; dragado de los sitios y zonas de maniobras de los Puertos de Ingeniero White, Galván y Rosales con sus correspondientes accesos.
Luego de la apertura de sobres de ofertas en abril pasado, la UTE adjudicataria fue quien presentó la oferta más conveniente por un monto total de U$S22.050.143 más IVA.
El dragado del canal de acceso al sistema portuario de Bahía Blanca y el canal de acceso a la Base Naval Puerto Belgrano se iniciaría durante el mes en curso.
En el caso del dragado de los sitios de atraque y zonas de maniobras de los puertos Galván, Ingeniero White y Rosales se prevé el trabajo durante noviembre y diciembre de este año.
Es importante destacar, que la obra de dragado anterior se hizo con una profundización adicional, que permitió que esta demora en el proceso licitatorio no afecte las condiciones operativas y tampoco ponga en riesgo la navegabilidad en canal de acceso y sitios.
En este mismo sentido y con el mismo objetivo, se prevé un sobredragado adicional en la ejecución de la obra licitada.
Paralelamente a la realización de los trabajos previstos en el presente contrato, se avanzará en la definición de un nuevo proceso licitatorio que, eventualmente, posibilitará posicionar una empresa contratista para la ejecución de tareas similares por un plazo mayor, considerado en 6 años.
El puerto de Bahía Blanca es el puerto de aguas profundas más importante de la Argentina porque permite la entrada de buques con un calado de hasta 45 pies.
Posee un rol estratégico porque permite que los buques que cargan en la zona de la hidrovía de Rosafe y no pueden completarse, ingresen a nuestro ámbito portuario y de esta manera puedan ser despachados buques completos, con menores costos.
El material de refulado (sedimentos extraídos) deberán ser depositados en tres zonas específicas, elegidas especialmente para no afectar el medioambiente del estuario.
El canal de acceso al puerto es de mano única, cuenta con una extensión de 97 kilómetros y ofrece posibilidad de giro en rada o muelles.
La profundización a 45 pies con marea baja (50 en alta) permite que los barcos salgan cargados a pleno durante un espacio mayor de tiempo y que lleguen buques de mayor porte, condición que justifica la contratación de fletes lejanos.
Un intento en 2017
El primer intento del Consorcio de Gestión para llevar adelante la obra se realizó en septiembre del año pasado, aunque sin resultados positivos.
La obra tenía un presupuesto oficial de 55 millones de dólares más IVA y no registró oferentes.
Luego se decidió subir el monto a 65 millones y allí sí hubo interesados.
Las empresas que se presentaron fueron la “China Communications And Construction Company Limited”, “Boskalis International y Cía. Sudamericana de Dragados S.A.” en forma conjunta; “Dredging International N.V.” y “Van Oord Dredging and Marine Contractors y Pentamar S.A.” en forma conjunta.
Esta licitación internacional fue anulada meses atrás por cuanto la nueva ley de la Marina Mercante impuso un nuevo marco regulatorio e hizo cambiar varias cuestiones buscando reducir costos.
A diferencia de la actual compulsa de precios el plazo de ejecución de las obras era de 6 años, con opción exclusiva del Consorcio a tres años más.
La profundización a 45 pies con marea baja y50 pies con marea alta permite que los buques de mayor calado puedan operar en los puertos locales, a máxima carga, durante las 24 horas del día.