Problemas estructurales y rachas
Más allá del "silencio" de la gobernadora María Eugenia Vidal que pidió “no politizar la situación”, los problemas para el la alianza gubernamental de Cambiemos no se detienen. Aún cuando se pretenda disimular mediáticamente otra cosa.
Es que, al menos en la Provincia, la explosión por acumulación de gas que se produjo en una escuela de Moreno donde murieron la vicedirectora y un auxiliar de educación –junto a la probable existencia de una “doble moral” por el caso de los “aportantes truchos de Cambiemos en campaña electoral según la investigación judicial – desinfló parcialmente de la agenda política, el nuevo escándalo por supuestos de sobornos, bautizado como “cuadernos de la corrupción” de la obra pública durante el kirchnerismo.
Tanto en la mesa chica de la gobernadora como dentro de la Legislatura casi “no se habla de otra cosa” por situaciones que incomodan al entorno ministerial de Vidal.
La indignación se trasladó a las diagonales. “ahora le quieren tirar toda la responsabilidad al gasista, me hace acordar a otro hecho, salvando las distancias, como fue la tragedia de Once cuando el "culpable" era el maquinista”, decían en mesas de café. La receta parece ser la misma de los últimos 30 años: echarse la culpa, confrontar, pensar quién es peor.
La administración Vidal ha destinado muchos recursos para mejorar la infraestructura de las escuelas y también la calidad de las comidas, se asegura. “Los municipios reciben aportes en materia de coparticipación como nunca antes. La plata del Estado es de los vecinos, la plata de los subsidios no era de (Julio) De Vido, era nuestra y la que terminó en bolsos también”, añade el senador bonaerense Roberto Costa (Cambiemos).
Pero la explosión provocada por una pérdida de gas en la escuela de Moreno y que fue denunciada hace meses a las autoridades educativas de la Provincia, demuestra la cara más trágica y evitable del ajuste. El drama no fue mayor porque los alumnos aún no habían llegado al establecimiento escolar.
Es inocultable la existencia de problemas estructurales en infraestructura escolar, como así también, la responsabilidad del Estado después de décadas de baja inversión en la materia.
Incómoda situación
El “carpetazo” sindical docente reveló la existencia de miles de escuelas con problemas de filtraciones, falta de mantenimiento, riesgo de electrocución, chapas sueltas en el techo, cloacas o pozos ciego que se desbordan, riesgo de derrumbe, falta de baños y otros inconvenientes que se vienen registrando y denunciando desde hace mucho tiempo atrás.
Situación más que incómoda para el economista y máximo responsable del área educativa, Gabriel Sánchez Zinny. Los “hechos estacionales” no paran de provocarle migrañas o cefaleas a Vidal.
A priori, de algunos análisis oficiales se desprende que, en el caso educativo, es un error político gubernamental haber volcado toda su energía en combatir a los representantes sindicales de los docentes en lugar de imponer un proyecto pensado en la educación.
Aquel mito de discutir salarios con los chicos en el aula, se derrumbó: los chicos están en el aula hace meses y cuando los gremios son convocados a la mesa de negociación paritaria se utiliza un método totalmente perverso que es el de ofrecer siempre lo mismo. Si hace falta un botón de muestra: la última vez la Provincia ofreció un 15% . Ese mismo día se anunciaron aumentos del 30 por ciento en el transporte público. Todo dicho.
"No está mal discutir salarios, pero también hay que ver qué puede dar la Provincia, qué está en condiciones de aportar hoy para mejorar los salarios docentes. Además, es fundamental hablar de solidaridad frente a las actuales circunstancias económicas", justifican desde Cambiemos.
La controvertida sanción (600 millones de pesos) que impuso el ministerio de Trabajo al gremio que conduce el barbado sindicalista Roberto Baradel por no acatar la conciliación obligatoria en la Provincia y adherirse al paro nacional convocado por la Ctera, el lunes y martes de la semana pasada, también ingresó en el terreno de la polémica.
“La multa al Suteba solo se explica por sus fines intimidatorios”, interpretan, porque no se respetaron los pasos sumariales que se deben seguir en estos casos. “Podemos decir que Moyano y Baradel actúan de un modo casi idéntico, por fuera de la ley y sin hacerse cargo”, afirmó Marcelo Villegas, titular de la cartera laboral.
Es inocultable la existencia de problemas en infraestructura escolar, como así también, la responsabilidad del Estado.