Ampliarán la actividad del regasificador de Escobar por la salida del buque local
El Expedient tendrá más trabajo luego de la partida en diciembre del Exemplar, que aún permanece amarrado en el muelle de Mega, en el sector de Cangrejales.
Al tiempo que el amarrado en Ingeniero White abandonará el país en diciembre, el que está ubicado en el Paraná aumentará su actividad.
Al menos esto sucederá hasta el próximo invierno, a la espera de una mayor producción en Vaca Muerta.
Mientras que se confirmó para diciembre la partida del buque Excelsior del muelle de Mega, la actividad del puerto regasificador que funciona en Belén de Escobar se intensificará en los próximos meses.
A partir de la finalización del contrato con el puerto de Bahía Blanca, el secretario de Energía de la Nación, Javier Iguacel, anunció que el buque Expedient aumentará su capacidad operativa “para el invierno”.
La medida apunta a compensar la producción del vital combustible, que faltará a partir del retiro del otro buque regasificador, el Exemplar.
Verano sin regasificador
La terminal regasificadora bahiense dejará de estar operativa a partir de este verano, tras una década de funcionamiento.
“Teníamos un puerto que desde el otoño a la primavera, pero con mucha frecuencia en el invierno, inyectaba unos 20 a 24 millones de metros cúbicos por día en el momento de máxima demanda, pero ahora lo estamos supliendo con Neuquén”, explicó Iguacel.
El funcionario afirmó que “para fin del verano” la cuenca neuquina “va a estar con capacidad para llenar el caño, con lo cual ya no tendría mucho sentido tener Bahía Blanca, porque si bien queda un poquito de capacidad de Bahía Blanca a Buenos Aires, es mucho menos lo que estamos usando.
Para suplir esa diferencia en la zona más poblada del país, el gobierno nacional decidió ampliar la capacidad del puerto regasificador de Belén de Escobar.
“Va a ser con exclusividad de uso para el invierno, el resto lo está alimentando Vaca Muerta”, adelantó sobre las funciones del buque Expedient, que está amarrado en el kilómetro 70 del río Paraná desde junio de 2011.
Las previsiones del secretario de Energía marcan que tras una reducción del 20% de los volúmenes importados este año, para el 2019 se proyecta reducirlas otro 50% en función del incremento de la producción nacional de gas.
Una planta flotante
Como vino informando desde hace casi dos meses La Nueva, la idea de YPF es instalar una barcaza flotante que realice el proceso inverso al regasificador, es decir, que licue el gas de Vaca Muerta y lo convierta en GNL para exportar, revirtiendo así las importaciones de un combustible caro.
La exportación de GNL será una prueba piloto para medir la escala que puede alcanzar el gas no convencional neuquino.
La tecnología que se busca contratar YPF permite una solución intermedia antes de instalar una costosa planta de licuefacción en tierra, sin embargo los costos iniciales para poner a competir el GNL criollo con el mundo son toda una incógnita.
El GNL es la puerta al mundo para Vaca Muerta. No lo es un aumento en la oferta doméstica, ya sea para generación eléctrica o para consumo industrial y domiciliario.
Tampoco parece ser la reciente reapertura de exportaciones a Chile.
Los envíos al vecino país, con la capacidad de transporte existente, podrían llegar a los 12 millones de metros cúbicos diarios.
Poco menos del 10% de la producción nacional actual. Y además el límite para ampliar esa capacidad, con obras que pueden demorar años, es el tope del consumo chileno.
El GNL puede ensayar una puerta rápida para captar y vender la producción creciente de gas.
Si bien aún parece lejos la capacidad para superar la estacionalidad de país (en invierno se seguirá importando gas), los sobrantes de fluido pueden tener un almacenaje y un nuevo mercado con la instalación del barco en Bahía.