Un estudio voluntario que brindó pautas interesantes
Convocaron a mujeres sedentarias con sobrepeso para que voluntariamente comenzaran a llevar adelante un programa de entrenamiento de resistencia con bicicleta, que consistía de tres sesiones semanales. Se les pidió además que mientras durara el estudio no modificaran ningún otro elemento de su estilo de vida.
A través de estudios de secuenciación de ADN, los investigadores analizaron la composición de la microbiota de las voluntarias y encontraron al final una reducción significativa de ciertas bacterias llamadas proteobacterias, cuya presencia se asocia a un estado de inflamación intestinal, junto con un incremento de bacterias de la familia Akkermasia, que suelen asociarse a un mejor fun-