La aparición de los buques no tripulados comienza a ser una realidad en el mundo
La compañía británica Rolls-Royce tiene entre sus planes el lanzamiento de barcos autónomos para el año 2020. Los primeros serían remolcadores o ferries, es decir, embarcaciones que realizan trayectos en entornos controlados.
Ahora que ya existen los vehículos autónomos, les llega el turno a los barcos, o así lo considera la compañía británica RollsRoyce que será una de las que lance buques no tripulados.
De hecho, la empresa presentó su visión de cómo funcionarán los barcos automatizados y dio a conocer los distintos modos de controlar el entorno del navío.
Esta proeza tecnológica será posible con la ayuda de inteligencia artificial que detectará y etiquetará a todos los navegantes marítimos, así como los marcadores de navegación y las costas.
Adicionalmente se empleará la tecnología de las redes neuronales para que la inteligencia artificial aprenda.
Así, Rolls-Royce ya está entrenando sus sistemas por medio de cinco millones de imágenes recopiladas de internet para que la inteligencia artificial sepa distinguir los diferentes obstáculos desde todos los ángulos.
Además, los buques automatizados estarán dotados de múltiples sensores que proveerán a los operarios humanos de una visión de 360 grados alre- dedor de ellos.
Para tal fin también se utilizará la combinación de los radares, cámaras y lidares: radares que en vez de emitir ondas de radio generan rayos láser.
Rolls-Royce prevé que los barcos sean completamente autónomos, aunque sí se monitorizarán por tripulaciones desde la costa.
Entre los barcos de mayor interés para la automatización están los remolques, ferris y buques de transporte a cortas distancias.
Este sistema tiene múltiples ventajas, afirmó el director de ingeniería y tecnología marina de la compañía, Kevin Daffey.
Por ejemplo se destaca la reducción de accidentes por error humano y el hecho de que las tripulaciones humanas “podrán volver a casa cada noche”.
Al igual que los vehículos automatizados, los buques sin tripulación no perderán concentración y no se cansarán.
También mejorará el aspecto económico de la navegación marítima.
Además de prevenir accidentes, los barcos no necesitarán sistemas de soporte vital que consuman energía durante las travesías.
Actualmente los ferris con el nuevo sistema están pasando pruebas en Japón, donde realizan travesías nocturnas en Koque Fabricado por la compañía noruega Offshore Sensing, el SB Met es un USV (Vehículo de Superficie no Tripulado, en sus siglas en inglés), algo así como un dron oceánico. Su diseño es sencillo: un casco con una voluminosa obra viva, una cubierta similar a una tabla de surf sobre la que se han instalado placas solares que alimentan los sistemas de navegación y comunicación y una vela rígida que propulsa la nave.
CEn los últimos años, los USV comienzan a ser empleados en misiones oceanográficas, ya que algunos de ellos, como las de la compañía nórdica, llevan a bordo sensores capaces de medir la altura de las olas o la salinidad del agua o hacer seguimientos a peces.