Julia Zenko: la felicidad de una guerrera
La cantante superó un cáncer de mama y regresó a los escenarios para seguir emocionando.
Julia Zenko volvió a cantar y eso es una alegría para todos aquellos que alguna vez la escucharon.
"Estoy feliz de estar en plena recuperación, adopté dos gatitas hermosas que me cambiaron la vida. Trato de que mi círculo más cercano me contenga en los momentos de bajón y de tristeza, y la verdad es que a esta altura de mi vida estoy muy agradecida de tener trabajo, una casa donde vivir y de haber formado una familia", explica Julia Zenko, la cantante, una de las más emblemáticas de la música popular argentina.
"Todo influye en la voz -continúa-, al interpretar una canción y hacerla mía, trato de meterme con un profundo compromiso con cada canción y eso hace que me pueda emocionar y llegar al otro, en el caso del cantante el sonido sale de adentro, estoy convencida que en el canto tiene que ver el estado espiritual de cada uno".
Nacida el 30 de octubre de 1958 en el barrio de La Paternal, Julia Zenko ganó recientemente el premio Gardel por "Nosotras", disco en donde recrea temas de compositoras argentinas como Fabiana Cantilo, Silvina Garré, Teresa Parodi, Eladia Blázquez, Marilina Ross, Hilda Lizarazu y Celeste Carballo, entre otras, y que contó con la dirección musical y arreglos de Lito Vitale.
En cuanto al significado que tiene para ella el hecho de haber recibido el Gardel, Zenko indica que "además de tener en mi repisa la imagen de uno de los más grandes cantantes de tango, tuve la posibilidad de dedicarle el premio a la memoria de mi mamá y a mis hijas, en un momento histórico de las mujeres, que estamos empezando a decir las cosas que nos hacen mal".
En relación a "Nosotras", la cantante destaca que es un trabajo que la hace feliz porque interpreta canciones que siempre quiso hacer, entre las que se cuenta "Piel naranja", de Marilina Ross, cuyo primer disco cantaba con sus hijas cuando eran niñas, según recuerda.
El álbum contempla canciones de Fabiana Cantilo, Silvina Garré, Teresa Parodi, Hilda Lizarazu y Celeste Carballo, a quienes considera como amigas, "todas me halagan mucho y a todas les encantó las versiones que hice", cuenta.